La Audiencia de Barcelona examinará una querella de Fiat contra Seat por el Panda cinco puertas
Antes de que finalice el mes de julio, la sección segunda de lo penal de la Audiencia Provincial de Barcelona deberá examinar y dictaminar la procedencia o improcedencia de una querella instada por la empresa Fiat contra Seat y Emelba, SA, por un delito de usurpación de la propiedad industrial, supuestamente cometido con la fabricación en España del modelo Panda cinco puertas. Esta acción judicial emprendida por Fiat contra Seat, tiene como telón de fondo el litigio que enfrenta a ambas empresas por la rescisión de su contrato de colaboración y que está planteado ante el Tribunal de Arbitraje Internacional de París.
El pasado 12 de abril el representante legal de la empresa Fiat presentó ante el juzgado de guardia de Barcelona, una querella criminal contra la empresa Seat por presunta infracción de la propiedad industrial tipificada en el artículo 534 del Código Penal y supuestamente cometida con la fabricación del modelo Panda cinco puertas. A lo largo de 20 folios, el abogado de la empresa Fiat acusaba a Seat y a Emelba, SA, de haberse apropiado y manipulado el modelo Fiat-Panda, creando sin su consentimiento el Panda cinco puertas y atribuyéndose a continuación la propiedad del mencionado proyecto. Recalcaba el abogado querellante que los pactos suscritos entre ambas empresas le otorgan a Seat el derecho de reproducir los modelos de Fiat pero no la de manipularlos y cambiarlos.El letrado de la multinacional italiana hizo especial hincapié, en su escrito dirigido al juez, del papel jugado especialmente por Emelba, SA, en el presunto fraude, ya que en diciembre de 1981 reclamó del Registro de la Propiedad Industrial la inscripción de la carrocería que motiva el litigio. La citada inscripción fue denegada gracias a la oposición de la casa Fiat, pero aún así se insistió en el proyecto y la fabricación del modelo presuntamente manipulado.
Rechazan la querella
Para el abogado querellante, se cumplen todos los requisitos legales que configuran la supuesta usurpación y hablaba de la existencia de una "apropiación del bien y de suplantación del derecho exclusivo", provocando según los querellantes un "perjuicio patrimonial gravísimo", que sólo podrá calcularse a lo largo de la investigación judicial y tras averiguar el número exacto de unidades del Panda cinco puertas vendidas.El pasado 14 de mayo, un mes después de instada la querella, el titular del Juzgado de Instrucción número 11 de Barcelona, Humberto de Guadalupe, dictó un auto no aceptando a trámite la querella. Argumentaba el magistrado-juez para desestimar esta querella que se trataba de un asunto civil y que a tenor del contrato entre las dos empresas, Seat puede introducir las modificaciones que crea pertinentes en el modelo.
El 27 de mayo, los representantes de Fiat volvieron a insistir ante el juzgado, con un recurso de reforma, para que admitiera a trámite la querella. El magistrado juez Humberto de Guadalupe repitió sus argumentos, rechazando la querella y remitiéndola a la Sala Segunda de la Audiencia Provincial de Barcelona, para que los magistrados decidieran sobre la viabilidad de la acción penal y agotasen así el procedimiento penal.
En el caso hipotético de que la sala de la Audiencia decidiera aceptar a trámite la querella, esta se remitiría al juzgado de instrucción, y no se descarta la posibilidad de que pudiese suponer la paralización de la fabricación de este modelo en España. Dentro de este campo de las hipótesis se especula en medios jurídicos con la posibilidad de que el verdadero objetivo de Fiat, al entablar este pleito, sea el de conseguir una nueva baza que apoye sus intereses en el pleito que se ventila en París.
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