Ramón Espinar, del PSOE, elegido por unanimidad primer presidente de la Asamblea de la Comunidad de Madrid
Ramón Espinar, alcalde de Leganés, fue elegido ayer por unanimidad presidente de la Asamblea de la Comunidad de Madrid. El Grupo Popular le prestó sus 34 votos, merced al protocolo firmado por ambos partidos en el que se consensua el reparto de puestos en la Mesa de la Asamblea. El PCE mantuvo la incógnita hasta pocos minutos antes del inicio del acto, momento en que se acordó reservar una futura vicepresidencia a los comunistas.
El acto de constitución de la Asamblea madrileña, celebrado en el paraninfo de la antigua universidad de San Bernardo, quedó deslucido por la inasistencia de miembros del Gobierno y de otras personalidades invitadas, entre las que destacó la ausencia del alcalde de Madrid, Enrique Tierno. En la sesión de la mañana se constituyó la Mesa de edad, presidida por el diputado más veterano de los elegidos, el socialista Miguel Peydró.Durante todo el día, antes del inicio de la sesión de la tarde en la que se elegiría el presidente de la Asamblea, fueron constantes los contactos entre comunistas y socialistas. Los primeros presionaron para conseguir que las dos vicepresidencias -la primera de las cuales fue ocupada por el socialista Luis Alejandro Cendrero; y la segunda por el aliancista Isaac Sanz- previstas en el reglamento provisional fueran ampliadas a tres, y ofrecida la sobrante a un comunista. Los diputados del PSOE se resistieron a la idea hasta que, por fin, se llegó a un acuerdo que aún no ha sido suficientemente explicado. Lorenzo Hernández, portavoz del Grupo Comunista, aseguraba que el acuerdo contempla la creación de la tercera vicepresidencia, reservada a un comunistas. Fuentes del PSOE puntualizaron, no obstante, que tal acuerdo sólo preve el estudio de la pretensión comunista, con muchas posibilidades de que salga adelante, pero sin que pueda darse ya por hecho. Hernández añadió que el PCE no renuncia a su deseo de contar, como mínimo, con un consejero en el nuevo gobierno regional, aunque los socialistas, de entrada, han anunciado que gobernarán en solitario. Por lo demás, la sesión de constitución y de elección del presidente de la Asamblea y demás miembros de la mesa fue larga y tediosa, con el agravante de que las primeras cuatro filas de asientos, reservadas a los miembros del Gobierno y otras personalidades de la oposición y de organismos oficiales, no fueron ocupados en ningún momento.
Después de la explicación de voto nor cada uno de los tres portavoces, Ramón Espinar tuvo una intervención en la que que manifestó su deseo de ser el presidente de todos los diputados, pero sin que eso obste a la hora de votar, comno un diputado más, del defendiendo los postulados de su partido. Espinar subrayó la importancia de que la Comunidad Autónoma de Madrid, en la que habitan ciudadanos venidos de todas los puntos de España, sea un ejemplo de buen funcionamiento y de consolidación del Estado de las autonomías.
El presidente cerró la sesión anunciando que el próximo lunes, a las cinco de la tarde, se iniciará la sesión de investidura del primer presidente del gobierno regional, puesto que recaerá, con toda seguridad, en el socialista Joaquín Leguina. Al término de la sesión constitutiva, Ramón Espinar expresó su gratitud a todos los diputados regionales y a su partido por haberle elegido unánimemente, y mostró sus deseos de que la cámara sea verdaderamente representativa. Disculpó la ausencia de ministros en la sesión debido a la reunión que celebraba a la misma hora el Gobierno.
Espinar afirmó que será el proceso de transferencias el que demuestre la equiparacion de la cornunidad autónoma madrileña con el resto de las existentes e informó que hoy jueves decidirá a qué sueldo renuncia, puesto que es incompatible su remuneración como alcalde de Leganés con la que le corresponderá en calidad de presidente de la Asamblea.
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