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Pediatras australianos denuncian que se ha dejado morir a niños con taras congénitas

A niños con deformaciones congénitas permanentes, físicas o mentales, se les ha dejado morir en Australia, según se ha puesto de manifiesto en una reunión científica convocada por el colegio australiano de pediatras. Según el presidente de la comisión de reforma legal, a niños con deformidades se les ha negado comida, facilitándoles únicamente calmantes y agua hasta su muerte, a pesar de que sus malformaciones no implicaban peligro para su vida.

Mientras se pone de relieve que tales prácticas podían contar con el respaldo de la mayoría de la sociedad, pero que, hoy por hoy, era ilegal, algunos moralistas se preguntaban abiertamente si no sería más indicado matar directamente a los niños deformes en lugar de dejarlos morir hipócritamente. A juicio de estos moralistas, el cambio en la actitudes sociales hacia el aborto podría llevar a cambios en las actitudes hacia el infanticidio de recién nacidos con malformaciones permanentes.

Salvar la vida

Algunos asistentes a la citada reunión se manifestaron categóricamente contrarios a tales prácticas y defendieron la realización de todos los esfuerzos posibles para salvar la vida de estos niños.La mayor parte de los científicos presentes creían que los padres eran incapaces de tomar la decisión de dejar morir a sus hijos con malformaciones permanentes. Es más, el rechazo de tales hijos es raro, se dijo, y muchas veces los padres insisten en salvar la vida de sus hijos.

La aplicación de los juicios de valor de algunos médicos sobre este tema podría llevarles a ser acusados de homicidio. Estas informaciones se producen sólo unos meses antes de que el Parlamento del estado de Victoria discuta un proyecto de ley que permitiría a los enfermos impedir la prolongación de sus vidas por medios médicos.

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