Los dirigentes de Euskadiko Ezkerra rechazan las amenazas de ETApm

Los dirigentes de Euskadiko Ezkerra, Juan María Bandrés y Marío Onaindía, salieron ayer al paso de las amenazas de ETA Político-militar de "actuar con todos los medios de que dispone una organización armada" contra los dirigentes de aquel partido político vasco si éstos "continúan llevando a cabo la operación arrepentidos".

Las amenazas de los polimilis fueron hechas en una conferencia de prensa ofrecida la pasada semana en el sur de Francia. Los dirigentes de EE señalaron ayer que la reacción de los etarras es "una salida de tono de unas personas que ven en peligro su protagonismo personal y, como tienen poco que decir, buscan publicidad a base de amenazar a otras personas". "No nos tiembla el pulso por esas bravatas ridículas, y, en lo que a mí respecta, seguiré intentando por todos los medios ayudar a resolver ese drama humano, aunque, naturalmente, respetando la decisión de los propios presos", dijo Juan María Bandrés.

Bandrés y Onaindía desmintieron que Euskadiko Ezkerra tenga nada que ver con los recientes traslados a otras prisiones de dos dirigentes polimilis, hasta ahora encarcelados, en Nanclares de Oca. Según los dirigentes de ETApm VIII Asamblea que participaron en la conferencia de prerisa en el sur de Francia, los traslados de Iñaki Arramayo y Santiago Suárez son piezas de "un plan muy sutil", consistente en "dispersar a los presos más preparados, política e ideológicamente, y luego someter al restó a presiones por parte de sus abogados y familiares, para que entren en el segunda fase de la operación arrepentidos".

Sobre las amenazas de los polimilis, Bandrés dijo que eso indicaría "la desesperación de un grupo de personas que, habiéndose quedado aisladas, y siendo en el fondo conscientes de que no tienen nada que decir, no dudan en capitalizar el drama humano de los presos, o en amenazar a otras personas, para seguir dando la impresión de que son muy importantes".

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