El papel de las elecciones
Es este un pequeño articulillo para hacerles pensar a ustedes sobre el papel de las elecciones. Me refiero al papel real, en su sentido estricto; al papel de la verdad; al papel que procede de la pasta de árboles talados, aserrados, triturados, machacados, maltratados y aplastados para que usted y yo podamos votar. Digno uso para una cosa que cada año crece otra vez y que, de seguro, para las próximas elecciones ya habrá regenerado brotes, ramillas -mustias o alegres- que volverán a enfrentarse a su destino: ¡la pasta de papel!Países más ricos en bosques que el nuestro usan papel reconvertido para todos los documentos y papeleo oficial. Sabia medida, es cierto, más no cabe duda que el papel resultante es medio amarillento, pobretón, nada apetecible si se compara con un flamante folio blanco vacío. A más de un funcionario vi desconsoladito por una de mis holandesas El Elefante.
Pero los árboles son importantes, y el papel reconvertido, aunque menos guapo, aguanta también todo lo que se le eche. Por fuera, los ministerios tampoco son guapos, y, según dicen, funcionan a pesar de ello.
Mi súplica es simple. Imagine usted todo el papel que se mueve en las elecciones. Imagine un ratito... abrumador, ¿no?, y además, al final de todo, a la hoguera, que el fuego siempre le llega, por uno o por otro lado. Pido, pues, que en futuros comicios se tenga el buen gusto de usar papel reconvertido. De ese modo, además del constitucional, el papel de las elecciones será asimismo mensaje de progreso y de uso racional de los recursos naturales. / Biólogo.