Diferencias entre UGT y CC OO en el convenio De banca

Las negociaciones de la revisión del convenio de banca se encuentran prácticamente en un callejón sin salida, una vez que los sindicatos presentaran ayer sus contrapropuestas a la oferta realizada el pasado sábado por la Asociación Española de la Banca Privada (AEB). Aunque la patronal no responderá hasta mañana, jueves, a la nueva plataforma sindical, fuentes cercanas a la AEB han señalado que las reivindicaciones de los sindicatos se encuentran muy alejadas de las previsiones empresariales. Por otra parte, empieza a detectarse un distanciamiento entre los propios sindicatos que componen la comisión negociadora.

La AEB dará mañana respuesta a las cuatro contrapropuestas presentadas ayer por UGT en la mesa de negociaciones y asumidas por CC OO y ELA-STV. Las contrapropuestas iban acompañadas por un documento elaborado por la central socialista en el que denunciaban actuaciones violentas de directivos bancarios durante la pasada huelga, a la vez que expresaba su opinión respecto a condiciones de trabajo en el sector, jornada y explicación de su rechazo a las últimas ofertas de la patronal. CC OO, que asumió las cuatro contrapropuestas de UGT, no quiso pronunciarse sobre el documento adjunto por desconocer su contenido hasta el momento de la reunión.La Intersindical Nacionalista de Trabajadores Gallegos (INTG) presentó, por su lado, oferta aparte. Las cuatro contrapropuestas que, según opiniones de la patronal, "serán estudiadas con todo interés, aunque se encuentran muy lejanas de nuestras previsiones", recogen incrementos salariales que van desde el 9,5% al 12,5%, en función de los demás aspectos que componen la revisión. En la primera propuesta se plantea un aumento salarial del 9,5%, revisión según Acuerdo Interconfederal (Al), 35 horas de jornada semanal y comisión paritaria para estudiar la reclasificación de categorías.

En la segunda, incremento del 12,5%, revisión según Al, aplicación inmediata de jornada legal de 40 horas y sábados libres y comisión paritaria para reclasificación categorías. La tercera propuesta recoge un incremento salarial del 11,61%. -la media de los convenios firmados hasta ahora-, revisión según Al, 40 horas de jornada semanal y comisión paritaria para reclasificación de categorías. Y la cuarta, incremento proporcional del 12%, revisión según Al, sistema de reclasificación de categorías -los actuales botones y ayudantes de banca pasarían a la escala administrativa- y 40 horas semanales con aplicación inmediata.

Reunión definitiva

Las diferencias entre alguna de las contrapropuestas son mínimas y están más en el matiz que en la forma. Por su parte, el INTG presentó, al margen de las otras organizaciones una propuesta que contempla incremento lineal de 11.000 pesetas, inclusión en el sueldo del plus especial de convenio, jornada de ocho de la mañana a tres de la tarde, con sábados libres, y un sistema de reclasificación de categorías.Aunque la AEB ha pedido de margen hasta el próximo jueves para estudiar las contrapropuestas, fuentes de la patronal adelantaron que sería muy difícil que las mismas pudieran ser acepta das. No obstante, valoraron positivamente su presentación por cuanto suponía que las negociaciones permanecían abiertas. La próxima reunión de la comisión negociadora se presenta así como definitiva y con pocas posibilidades de salida.

Entre las organizaciones sindicales que participan en las reuniones del convenio de banca han empezado ya aparecer las primeras fisuras. Por parte de UGT existe un deseo claramente expresado de acudir al arbitraje voluntario, mientras que CC OO ha mostrado su total rechazo a este tipo de intervención. UGT basa su predisposición al arbitraje en la imposibilidad real de avanzar en las negociaciones tal como en la actualidad se encuentran planteadas. Para la central socialista, los únicos caminos que quedan son el arbitraje o una nueva convocatoria de huelga que difícilmente tendría el mismo eco de las pasadas y que, finalmente, habría de desembocar en una intervención del Gobierno.

CC OO no desea bajo ningún concepto el arbitraje. A su juicio supone la renuncia a la actividad sindical, volviendo a un pasado intervencionista que solapa el papel que deben ejercer las centrales de clase en la negociación colectiva. Otra cosa muy distinta es la posible mediación, aceptada y pedida reiteradamente, que no obliga, en definitiva, a ninguna de las partes.

Pero subyaciendo en todas las ofertas y contraofertas, propuestas y contrapropuestas, posibilidades e imposibilidades, el tema de la jornada se muestra ahora como el verdadero caballo de batalla de las negociaciones. A cambio de la jornada partida, la patronal estaría dispuesta, según algunas fuentes, a saltarse, si pudiera, el tope de la banda salarial.

UGT lo considera un factor fuera de toda negociación. Para la central socialista, se trata de una "conquista obrera" y, por lo tanto, absolutamente irrenunciable. Y confía que el arbitraje que ahora demanda -respetará este logro.

CC OO no lo tiene tan claro y parece estar dispuesta a negociar cualquier salida de la actual situación, incluida la jornada partida, a pesar de que oficialmente se niegue a entrar en la discusión de estos temas mientras no se agoten las propuestas planteadas actualmente en la mesa de negociaciones.