_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El ritmo y el viento

El viento volvió a jugar una baza importante en la Vuelta. Ya no cabe duda de su protagonismo frente a la montaña. Los españoles apenas saben andar con este elemento y si es a favor, como ayer, favoreciendo las altas velocidades, ni siquiera es un problema de cortes o abanicos, como cuando sopla de lado. Es una cuestión de ritmo, estilo Giro, Tour o carreras europeas, a las que pocos corredores nacionales están acostumbrados. El descuidado en esta ocasión fue Gorospe. Perdió poco tiempo, pero sí el suficiente para dejar el liderato a Alberto Fernández, cuarto hombre aspirante al triunfo final, más listo ayer, como Lejarreta. El tradicional maillot amarillo ha pasado ya por el póker de ases, con Kuiper de eterno candidato La carrera es un auténtico torbellino de interés.Los tres mejores españoles han sufrido ya los rigores de los cortes y los abanicos. En Cuenca, Fernández perdió 45 segundos. En Soria, anteayer, Lejarreta, más de dos minutos. Los extranjeros no dejan pasar en los llanos cualquier oportunidad de rebañar segundos a los españoles. Así se ganan también las grandes rondas por eta pas. Se suele definir en una joma da clave, pero la colocación para llegar a ella viene de pequeñas dosis. Hinault, rabioso desde Panticosa, viene arañando tiempo y acercándose a la cabeza. Ya está a menos de dos minutos de los dos rivales que le preceden. A 1.56 de Alberto y a 1.48 de Gorospe. Al primero le restó cuatro segundos y al segundo, 14.

Más información
Alberto Fernández quitó el liderato a Julián Gorospe

Hoy habrá otro teórico paseo hasta Burgos. Serán 147 kilórnetros, con perfil en subida hasta el fácil alto de la Pedraja, de tercera categoría, a sólo 28 kilómetros de la meta. El descenso será continuo después y como la etapa es muy corta el peligro vuelve a ser tremendo, salvo que el temible viento sople de cara. Los posibles cortes serían entonces en pelotones más numerosos y los mejores españoles podrían tener más oportunidades de meterse en el primero.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_