Del 29º Congreso del PSOE a la ratificación

El pleno del Congreso de los Diputados aprobó ayer una autorización para que el Gobierno ratifique el Convenio de Amistad, Defensa y Cooperación entre España y los Estados Unidos de América. La autorización comprende un total de 27 documentos -el Convenio Básico, siete convenios suplementarios, nueve anejos, dos apéndices y ocho canjes de notas-, firmados el 2 de julio de 1982 por el Gobierno ucedísta de Leopoldo Calvo Sotelo y el Protocolo suscrito por el actual ministro de Exteriores, Fernando Morán, y el embajador norteamericano, Terence Todman, el 24 de febrero de 1983. Los diferentes textos suman 180 folios. De no haberse producido el acuerdo, los Estados Unidos deberían haber iniciado el próximo 21 de mayo el desmantelamiento de las instalaciones.Bajo esta autorización, España concede a los Estados Unidos de América, para fines militares, la utilización y mantenimiento de instalaciones de apoyo (IDAS) en las bases aéreas de Morón, Torrejón de Ardoz y Zaragoza, en la base naval de Rota y en los establecimientos de Polvorines y Depósitos de Cartagena, Estaciones de Comunicaciones de Humosa, Inogés, Guardamar del Segura, Sóller y Menorca, Relé de comunicaciones de Estaca de Bares, Estación LORAN de Estartit y Estación meteorológica y sismológica de Sonseca.

El convenio complementario dos fija el estatuto de las autorizaciones de uso (ADUS), aplicables dentro de los objetivos definidos. En los canjes de notas se determinan las unidades de las Fuerzas de los Estados Unidos de América, destinadas con carácter permanente o rotativo en las Bases y establecimientos españoles que alcanzan los siguientes efectivos: 127 aviones de caza tácticos, 20 aviones cisternas, 5 aviones admiinistrativos, 5 helicópteros, 18 aeronaves patrulla, 13 aeronaves de reconocimiento y 8 aeronaves logísticas. A su servicio se encuentra un personal norteamericano de 12.545 militares y 1.669 civiles.

Fuentes gubernamentales estiman que, tras la firma del Protocolo, el Convenio cuya ratificación queda ahora autorizada está en la línea defendida desde hace tiempo por los socialistas, según la cual "el equilibrio de la situación defensiva del área occidental no debe ser alterado para evitar de esta manera un aumento de la tensión en el mundo, principalmente en Europa". Insisten también en que el Convenio cumple los requerimientos expresados con anterioridad en el programa electoral del PSOE, de septiembre de 1.982, a tenor del cual "la relación militar con los Estados Unidos debería mantenerse en condiciones medidas, igualitarias, de equilibrio y fijadas en el tiempo, tal como exigen los presupuestos de de la nueva situación democrática de nuestro país".

La resolución de política exterior e internacional del 29 Congreso del PSOE, celebrado del 21 al 24 de octubre de 1.981, señalaba que "la política exterior de los gobiernos de UCD ha ido situando a España en una línea de progresiva dependencia de los Estados Unidos con grve compromiso para nuestra soberanía e independencia nacionales, que son objetivos irrenunciables para el PSOE y que la derecha gobernante trata de asociar falsamente al aislacionismo. Supeditar los intereses de España a los intereses geoestratégicos de un tercer país es un principio que debemos denunciar y combatir".

La referida resolución añadía que "como alternativa, el Partido Socialista ofrece un sistema de defensa propio, definido conforme a los intereses nacionales, que garantice nuestra contribución al sistema defensivo occidental".