_
_
_
_
CATALUÑA

La Policía barcelonesa detiene a Raymond Vaccarizi, el gánster más buscado de Francia

Raymond Vacicarizi, el gánster más buscado de Francia, ha sido detenido por inspectores de la Policía Judicial de Barcelona. Vaccarizi, considerado el enemigo público número uno en el país vecino, fue apresado el pasado martes, en compañía de sus cuatro hombres de confianza. Las autoridades francesas ya han solicitado la extradición de los detenidos.

Raymond Vaccarizi y sus cómplices han sido detenidos por el Grupo de Delincuencia Internacional de la Brigada Regional de la Policía Judicial y, a pesar de la solicitud de extradición, deberán cumplir condena en España, ya que sobre ellos pesa en nuestro país una acusación de falsificación de documentos.Vacearizi está acusado de tiple asesinato, una veintena de atracos y de proxenetismo. La Sureté (Cuerpo Superior de Policía de Francia) le considera "altamente peligroso". El célebre gángster expresó ayer su satisfacción por haber sido detenido por la policía española. "Me han tratado muy bien, mucho mejor de lo que lo hubieran hecho mis compatriotas", manifestó mientras era le trasladaba al calabozo de la Jefatura barcelonesa.

La historia de la detención de Vaccarizi y sus lugartenientes se remonta cuatros meses atrás. La policía francesa, concretamente los inspectores del Groupo de Represión del Bandidismo de Lyon, realizaron una gran redada en aquella ciudad, fruto de la cual se logró detener a una treintena de personas de los bajos fondos. Sin embargo, el cerebro, Raymond Vaccarizi, había logrado huir. En los posteriores interrogatorios, los investigadores lograron saber que el jefe de la banda había alcanzado la frontera y se encontraba escondido en España, concretamente en Barcelona. A principios de mes las autoridades policiales galas solicitaron la ayuda de las autoridades españolas.

Después de largas investigaciones, los inspectores barceloneses lograron localizar el escondite de los hombres de Vaccarizi, en un piso situado en el 153 de la Avenida Meridiana de Barcelona. Sin embargo, tras varios días de vigilancia, Vaccarizi seguía sin aparecer. El pasado martes la banda de Raymond abandonó ese piso. para dirigirse a otro, situado en la Rambla de la Montaña 67, donde les esperaba su jefe. Sobre las 17 horas, Vaccarizi y sus hombres abandonaron el piso; en la calle, siete inspectores les esperaban. No opuso resistencia alguna.

Raymond Vaccarizi, a pesar del aspecto sonriente, es "un individuo extremadamente peligroso", según los policías galos.

Nacido en la localidad de Marnia, hace 33 años, se le considera el sucesor de otro legendario gánster francés, Jacques Mesrine, muerto en París durante un tiroteo con la Policía.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La última vez que los policías galos vieron de cerca a Vaccarizi fue en una emboscada que le tendieron en un edificio en las afueras de Lyon. Hacía un año que había abandonado la penitenciaria y ya había cometido varios atracos y, presuntamente, ordenado la muerte de tres proxenetas que le hacían la competencia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_