El líder de la oposición de Zimbabue, Joshua Nkomo, salió ayer hacia Londres
El jefe de la oposición de Zimbabue, Joshua Nkomo, tomó ayer por la tarde, en Johannesburgo, un avión con destino a Londres, según anunció una radio surafricana. Refugiado desde el martes en Botswana, Nkomo abandonó el país a bordo de un avión privado y no mantuvo ningún contacto con la Prensa.Un importante dispositivo de seguridad, integrado por unos setecientos policías, había sido montado el viernes en el aeropuerto de Johannesburgo.
Por su parte, el primer ministro de Zimbabue, Robert Mugabe, declaró ayer en Victoria (islas Seychelles) que creía que Nkomo modificaría su decisión de abandonar Zimbabue y que volvería al país.
Mugabe, que se encontraba de escala en Victoria a su regreso de la séptima cumbre del movimiento de países no alineados de Nueva Delhi, se declaró sorprendido por la noticia de la huida del jefe de la Organización Popular Africana de Zimbabue (ZAPU), el martes pasado, a Botswana.
"No comprendo por qué ha querido dejar el país", señaló Mugabe. "Si se sentía amenazado", agregó, "podía haber recurrido a las fuerzas de seguridad. Debe ser protegido y nuestro deber es protegerle. Tampoco comprendo sus acusaciones".
Nkomo había acusado al primer ministro, Mugabe, de haber intentado asesinarle por razones políticas.
La salida de Nkomo de Zimbabue parece haber provocado, por otra parte, un acercamiento entre la nueva dirección provisional del ZAPU y la del ZANU (Unión Nacional Africana de Zimbabue), partido de Mugabe.
Joshia Chinamano, vicepresidente del partido de Nkomo, anunció el viernes que había sido designado presidente provisional del ZAPU, dada la ausencia del presidente, Nkomo. Perteneciente a la mayoría étnica shona, Chinamano lanzó un llamamiento a favor de la unidad de los dos partidos. El diálogo entre el ZAPU y el ZANU quedó interrumpido tras una reunión que se celebró en diciembre pasado entre Mugabe y Nkomo.
Rechazando las críticas de algunos ministros que asocian el ZAPU a la resistencia armada que llevan a efecto ex guerrilleros del ZAPU en Matebeleland, Chinamano declaró también que Nkomo había tomado la decisión personal de irse de Zimbabue, sin que el partido hubiese adoptado ninguna medida al respecto.
Pero parece poco probable que los guerrilleros acepten la actitud conciliante de Chinamano, dado que las divergencias políticas y étnicas han sido agudizadas por las intervenciones del Ejército, que han producido, según las fuentes disidentes, la muerte de más de mil civiles en la región de Matebeleland, en el marco de la caza a los disidentes y a sus partidarios.
Por otro lado, la esposa de Nkomo, Johanna, fue liberada el viernes, tras haber sido detenida el día anterior a raíz de la huida de su marido. Su hijo y la hija de su yerno, igualmente detenidos, serán liberados próximamente, según un portavoz gubernamental.
Además de la familia de Nkomo, un cierto número de dirigentes del ZAPU fueron detenidos en el curso de las últimas semanas en el sudoeste de Zimbabue.
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