Sabían demasiado

Somos dos de las muchas personas que buscan desesperadamente empleo. Debido a tan tremenda demanda del mismo, cada día son más exigentes las pocas ofertas que se producen.Por esta razón nos hemos decidido a aprovechar tan-involuntario-tiempo-libre, intentando utilizar la posibilidad de hacer cursos (le formación y/o perfeccionamiento que nos brinda, a este colectivo, el Ministerio de Trabajo a través del INEM.

Unas noventa personas, entre ellas nosotras dos, que no tenemos conocimiento alguno de taquigrafía y mecanografía, nos presentarnos el día 16 de febrero de 1983 a tina prueba de acceso al curso "Secretaria taquimecanógrafa. Iniciación", para el que se convocaban veinte plazas.

Mayor no pudo ser nuestra sorpresa cuando, al preguntar quiénes eran los admitidos, se nos dice que los aspirantes que habían obtenido entre cuatro y seis puntos. Aun cuando nosotras hemos obtenido 8,2 y 9 puntos en la misma prueba, consistente por cierto en meros conocimientos generales, como ortografía, cómo se llama el presidente del Congreso de los Diputados; y ni una pregunta sobre taquigrafía o mecanografía. El propio director del centro nos declara no admitidas por exceso de conocimientos... ¡Dios nos libre!

Al protestar, como es lógico (al menos debería serio) ante instancias superiores, se nos añade que no es posible hacer nada, porque cada centro tiene autonomía plena para realizar la selección, y que el director de éste no rectifica.

El curso comenzó en la fecha prevista (23 de febrero de 1983) y en las condiciones mencionadas, aun cuando lo hemos impugnado. / Paloma de la Fuente y María Dolores Moreno.