El debate parlamentario sobre la expropiación de Rumasa puede aplazarse una semana

El portavoz de la Minoría Catalana, Miquel Roca, tenía anoche el firme propósito de solicitar hoy, en la reunión que tiene previsto celebrar la Junta de Portavoces del Congreso de los Diputados, el aplazamiento del debate parlamentario sobre la expropiación, por parte del Gobierno, del grupo de bancos y empresas de Rumasa. Esta decisión del político catalán la fundamenta en que prefieren esperar a la información que dará el ministro de Economía, Miguel Boyer, sobre la expropiación. para elaborar su réplica.

El Grupo Parlamentario Socialista estaba intentando anoche convencer a Roca para que cambiara de actitud, y, de no lograrlo, esta tarde no se celebrará el esperado debate sobre el caso Rumasa.Algunos responsables socialistas tenían sus dudas, ya desde la mañana de ayer, acerca de si finalmente iba a celebrarse hoy el mencionado debate parlamentario. En otros círculos se apuntaba a una posible oposición de la Minoría Vasca, en cuya oficina de información en Bilbao aseguraron. ayer a este periódico que no tenían siquiera una noción sobre la postura de los nacionalistas vascos en el debate sobre Rumasa, y que su portavoz, Marcos Vizcaya, estaba ayer ilocalizable.

Esta ausencia de datos sobre los propósitos de quienes en un primer momento parecían que iban a ser los que impidieran el debate, dejaba el tema en suspenso. Como confirmó a EL PAIS el presidente del Congreso, Gregorio Peces-Barba, sólo con que se oponga un grupo parlamentario, el debate queda automáticamente aplazado.

A última hora de la tarde de ayer, Miquel Roca confirmó a este periódico que su postura es la de esperar a que el ministro Miguel Boyer consuma la hora y media que se le va a asignar, en la tarde de hoy, desde la tribuna de oradores del Congreso, para que justifique la expropiación de Rumasa, y esperar hasta el próximo martes a la votación de la propuesta del Gobierno de convalidar el decreto-ley. Roca se opondrá a que se presente el decreto de convalidación de la medida expropiadora del Gobierno, ya que eso implicaría necesariamente la celebración de un debate.

Roca añadió que su plan lo consultará con los representantes de los otros grupos, y que tomará la decisión final una vez sepa el respaldo con que cuenta. Los doce diputados de la Minoría Catalana pretenden oir primero al triministro y elaborar después, basándose en esa información, la intervención de media hora asignada a su portavoz y decidir el voto.

Recurso de inconstitucionalidad

No obstante, anoche, a la hora de cerrar esta edición, se estaban efectuando gestiones para que Miquel Roca cambiara de actitud, lo que no parecía probable. En el Grupo Socialista se desconocía asimismo cual iba a ser la decisión final de la Minoría Vasca,

Esta circunstancia, de confirmarse, desarticularía toda la estrategia de los grupos restantes, especialmente el Grupo Popular, de Manuel Fraga, que anoche presentó en el Juzgado de Guardia de Madrid un recurso de inconstitucionalidad contra el decreto-ley de expropiación de Rumasa, recurso que será devuelto por el juzgado, dado que para ese recurso no vencía ayer ningún plazo, por lo que no es necesario presentarlo en el citado juzgado, tal como informaron fuentes judiciales a Europa Press. El Comité Ejecutivo de Alianza Popular, reunido durante toda la tarde de ayer, consumió practicamente todo su tiempo en estudiar el caso Rumasa. Según el responsable de información de AP, Carlos Mendo, hubo absoluta unanimidad entre los miembros del ejecutivo, tanto en la postura a adoptar en el debate -presentar el mencionado recurso y votar el contra del mismo-, como en la redacción de la contundente nota que se redactó al final de la reunión (Ver página 45).

En el Grupo Popular no se tenía anoche conocimiento del posible aplazamiento del debate, por lo que estuvieron durante varias horas preparando la intervención. Si intervenía Felipe González, Manuel Fraga le daría la réplica, y si lo hacía Boyer, serían el portavoz Miguel Herrero.