El Atlántico, con sede en Cataluña, afectado por la crisis

Los efectos más importantes de la crisis del holding de la abeja en Cataluña son el traspaso al sector público del primer banco privado con sede radicada en el Principado y la expropiación del tercer grupo empresarial champañero, fabricante de cavas. Cataluña ha sido tradicionalmente la comunidad en que el grupo Rumasa ha registrado una mayor cifra de negocio, y donde desarrolla su trabajo más de una quinta parte de su plantilla total. En marzo del año pasado el grupo superaba en Cataluña la cifra de 11.000 empleados.

En el sector del cava, uno de los que menos han notado la crisis y que goza de una gran salud exportadora, Rumasa es propietaria de las firmas productoras CastelIblanch, Conde de Caralt, Canals & Nubiola, Segura Viudas y René Barbier. Estas empresas totalizan una capacidad de producción anual de catorce millones de botellas, lo que supone un 10% de la cifra global del sector. El grupo rumasiano del cava se sitúa en el tercer lugar del ranking, después de las dos grandes, Cordorniu y Freixenet. La producción de las dos lídetes supone un 80% del mercado, y el restante 10% está repartido entre pequeñas y medianas cavas.Las dos primeras empresas del grupo Rumasa, Castellblanch y Segura Viudas, exportaron en 1982 1,2 millones de botellas, mientras que Freixenet colocó en el exterior 5,5 millones. Hace unos meses, el grupo quiso ampliar su presencia en el mundo del cava mediante la adquisición de la marca L'Aixertell, que acabó entrando en la órbita de Freixenet. Pese a la creciente presencia del grupo en este ramo de la industria agroalimentaria, no se registraron ayer reacciones contrarias a la expropiación por parte de los otros industriales champañeros privados, siempre sensibles en estas tierras a la eventualidad de una competencia desleal por parte del sector público.

En los consejos de las firmas del grupo figuran, entre otros,"el antiguo director de La Vanguardia, Horacio Sáenz Guerrero, y el vicepresidente del Fútbol Club Barcelona, Joan Gaspart Solves, vinculado familiarmente al presidente del Banco Condal, Guillerino Bueno Hencke, y presidente de Hoteles Unidos, SA (HUSA), cadena turística que compite con los complejos turísticos de Ruiz Mateos agrupados en Hotasa.

El primer banco catalán

El otro gran sector afectado en Cataluña por la crisis de Rumasa es el financiero. El Banco Atlántico es la ficha cabecera de la división bancaria del holding presidido por Ruiz Mateos. Según los datos del Consejo Superior Bancario, totalizaba, a final de 1982, 189.086 millones de pesetas en recursos ajenos, casi el tercio de los depósitos del conjunto de los dieciocho bancos del grupo. Apenas tres meses después de que el primer grupo bancario catalán, organizado en torno a Banca Catalana, pasase al control del Fondo de Garantía de Depósitos en Instituciones Bancarias, dejando el liderazgo de la banca con sede en Cataluña al Atlántico, éste pasa a la protección del patrimonio del Estado. El paquete de Rumasa en el Banco Atlántico -que, al parecer, es el más saneado de la división bancaria-aún siendo minoritario, conlleva el control de su gestión. Sin embargo, desde la entrada del holding de la abeja en el banco, hace varios años, la presidencia ha seguido encomendada a Casimiro Molins, (cuñado del ex ministro Laureano López Rodó), uno de los fundado,res, junto con José Ferrer Bonsoms, del grupo Atlántico-Bankunión.

Esta técnica se ha aplicado, en forma similar, al Banco Condal, el segundo de importancia en la zona, que tras ser comprado al grupo de José María de Porcioles en diciembre de 1974, conservó en su presidencia a Guillermo Bueno Hencke, actual vicepresidente de la Cámara de Barcelona.