España y Francia, defenderán la estabilidad del régimen marroquí

Los Gobiernos socialistas de España y Francia parecen decididos a favorecer conjuntamente un entendimiento entre Argelia y Marruecos que garantice la estabilidad en el Magreb y abra una vía de diálogo político, económico y de seguridad en el Mediterráneo. Para ello, tanto Madrid como París pretenden convencer al rey Hassan II de su sinceridad al defender, como un objetivo primordial, el mantenimiento de las actuales instituciones marroquíes, según informa desde

Así lo manifestó el presidente francés, François Mitterrand, en su reciente visita al reino alauita, al afirmar ante Hassan II que las tradicionales posiciones socialistas en defensa del respeto a los derechos humanos y la autodeterminación de los pueblos no tienen porqué provocar controversias entre los dos Gobiernos. Mitterrand hizo saber, también, su conformidad con la solución propuesta por Hassan II de cerrar el conflicto de Sahara por la vía de un referéndum, y con "las esperanzas que contiene la Constitución marroquí".La impresión que se tiene en Rabat es que el presidente del Gobierno español, Felipe González, mantendrá en su viaje a Marruecos -previsto para las próximas semanas pero sin fecha fija- posiciones muy similares, tal como se deduce de las manifestaciones del ministro español de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, durante su visita a Marraquech en la pasada Navidad. Se trataría de renovar la histórica colaboración franco-española en el Magreb.

Subsisten, sin embargo, dos grandes dificultades para una actuación conjunta de los dos Gobiernos socialistas. Por un lado, que no está de antemano garantizada la adhesión de Marruecos a este proyecto. Además, el hecho de que Francia tiene en Juego en el Magreb intereses, fundamentalmente económicos, mas importantes que España.

Una dificultad adicional es la confusa situación de la política interna marroquí, como se ha puesto de manifiesto tras la muerte, en presunto atentado, del general Dlimi, uno de los más destacados militares del país. Una crónica sobre la existencia de un posible compló en torno a la muerte de este general provocó ayer la detención administrativa del corresponsal del diario francés Le Monde, Roland Delcour, quien puede ser expulsado del país.

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