Manuel Fraga
El carácter de un individuo, su personalidad, decía Ortega, no se descubre en sus actos y en sus palabras, porque los puede fingir no para engañar a los demás, sino, sobre todo, para engañarse a sí mismo. Conviene fijarse, en cambio, en lo impremeditado, aunque parezca lo menos importante. Y Ortega hablaba del gesto y la fisonomía. Por eso, aunque se podrían decir muchas cosas del artículo de Fraga (y no dudo que otros las dirán), sólo quiero fijar la atención del lector sobre una frase que es, sin duda, fruto de la espontaneidad de su pluma. Manuel Fraga no escribe, como sería usual, "vayamos, pues, a las realidades", sino, considerando que en él está la verdad y no en los demás, dice "vengamos, pues, a las realidades". De la fisonomía del señor Fraga no hace falta ni hablar. /
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.