Los damnificados por la riada dejan de pagar impuestos y anuncian una huelga general

Los damnificados de la riada de Valencia se niegan a pagar impuestos estatales y municipales hasta que el conjunto de reivindicaciones planteado sea atendido adecuadamente. Representantes de los afectados se reunieron en un teatro de Alcira la noche del lunes, donde pasaron revista a la situación tres meses después de la riada y acordaron tomar medidas de fuerza por la demora con que están llegando las ayudas prometidas. Los habitantes de las comarcas inundadas han propuesto realizar un paro general durante los días 1 y 2 de febrero para sensibilizar al Consejo de Ministros del miércoles acerca de la situación en la ribera del río Júcar.

Esta situación coincide, sin embargo, con la promesa de la inminente llegada de parte de la ayuda de diez millones de dólares enviada por Arabia Saudí a las zonas españolas inundadas. Según el reparto efectuado por la Dirección General del Tesoro del Ministerio de Hacienda, a Valencia le corresponden 903 millones de pesetas, de esta cantidad global. Esta ayuda supondrá también para Murcia la cantidad de 35 millones y para Albacete 57 millones de pesetas. Según información facilitada por la Presidencia de la Generalitat valenciana, en el transcurso de esta semana se producirá el ingreso de esta cantidad en la cuenta de damnificados abierta con la Consejería de Gobernación..Los damnificados han anunciado que celebrarán una última reunión para coordinar la huelga el sábado próximo, esta vez en Carcagente. Allí se unificarán los criterios de poblaciones más pequeñas que no asistieron a la asamblea. El día 1, una representación de la Ribera tiene intención de trasladarse a Madrid para hacer entrega, a un ministro del Gobierno González, de su tabla reivindicativa para que sea abordada en la reunión ministerial del miércoles. Mientras tanto, en la calle, en sus pueblos, los afectados apoyarán esta entrevista con un paro de la escasa actividad industrial y comercial que se produce en la Ribera.

Medidas de presión

La asamblea contó con la presencia de los gremios de comerciantes, que apoyaron desde el primer momento la adopción de medidas de presión, y miembros de la coordinadora de pueblos damnificados, así como de la Asociación de Afectados por las inundaciones de Valencia (Afiva). Las corporaciones municipales, con mayoría socialista, están intentando por su parte tomar posiciones mediadoras para compaginar el ritmo gubernamental con la inquietud y la intranquilidad existente en las zonas inundadas.La tabla reivindicativa de catorce puntos aprobada por la asamblea se refiere a la percepción completa de la subvención a fondo perdido, de un cuarto de millón de pesetas, por cada uno y todos los damnificados. El ritmo de percepción de esta cantidad está siendo desigual entre poblaciones y, dentro de éstas, entre las diferentes familias damnificadas. En segundo lugar, los afectados por las inundaciones reclaman ampliar los plazos de cancelación de los préstamos a nueve años para el Banco Hipotecario de España y el Banco de Crédito Industrial y a catorce años en el caso de préstamos de carácter agrícola y de vivienda.

Los afectados reclaman ampliar la línea de crédito establecida por el Banco Hipotecario de España para que financie no sólo los daños en edificios sino también el mobiliario, enseres y existencia perdidas con el barro. Más adelante, la tabla reivindicativa reclama a la Dirección General de Seguros el control de as entidades privadas que estén obligadas a hacer frente al pago le sus pólizas para que no se produzcan las infraperitaciones jue en la actualidad acontecen. reclaman la exención de cuotas le la Seguridad Social durante medio año desde el 20 de octubre, y de cuotas por licencia fiscal, contribución rústica y urbana, así como las tasas de arbitrios correspondientes para el ejercicio de 1983.