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Los socialdemócratas finlandeses forman nuevo Gobierno sin los comunistas

El primer ministro finlandés, Kalevi Sorsa, anunció ayer en Helsinki la formación de un nuevo Gobierno de coalición de centro-izquierda sin comunistas, que entrará en funciones mañana.Cinco horas después de la dimisión del precedente Gobierno que dirigía, a raíz del rechazo de los diputados comunistas de votar el miércoles el presupuesto de defensa, Sorsa, de 52 años, anunció la formación de una nueva coalición que reagrupa al Partido Socialdemócrata, con siete ministros, y al Partido Sueco (que representaa la núnoría de habla sueca), con dos ministros. Paer Stenbaeck, de este último partido, seguirá siendo ininistro de Asuntos Exteriores.

Los tres ministerios que en el Gobierno precedente habían sido ocupados por los comunistas (Educación, Trabajo y Transpartes) han sido ahora otorgados a socialdemócratas, indicó el primer ministro. Además, el ministro de Comercio Exterior, Esko Recoala, que no está afiliado al partido, será sustituido por Arne Berner, miembro de la tendencia liberal del Partido del Centro. El nuevo Gobierno contará en el Parlamento con 103 votos sobre doscientos.

El partido comunista declaró que su voto del miércoles contra el presupuesto de defensda, uno de los más reducidos de Europa, no estaba dirigido contra el Gobiemo y a provocar una crisis, sino que correspondía a la adopción de una postura de principio en favor del desarme.

En los medios políticos se estima que el partido comunista, profundamente dividido entre prosoviéticos y moderados, quiere pasar a la oposición antes de las elecciones generales de marzo de 1983 para conseguir una reunificación interna y obtener el apoyo de Ios movimientos pacifistas.

A la proximidad de las elecciones se suman otras características especiales de la crisis que acaba de cerrarse. Que hayan sido los representantes comunistas en el Gobierno quienes se hayan opuesto a incrementar los gastos en la compra de armas y equipos militares, que serían adquiridos en la Unión Soviética, y que un miembro de la Internacional Socialista, con fuerte apoyo entre los pacifistas finlandeses, como Kalevi Sorsa, quien proponga la adquisición de material bélico, ha resultado un tanto paradójico.

Este último argumenta que una parte de esos equipos serán fabricados en el país, lo que contribuirá a combatir una creciente desocupación, actualmente estimada en un 6%.

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