Examen forense sobre una violación cinco meses después de producirse

El médico forense, Manuel Martínez Carrasco, practicó anteayer en Murcia examen médico ordenado por el juzgado de instrucción de Orihuela (Alicante) a la joven Mari Carmen Olmo, de 18 años, como prueba de que la violación que ésta denunció haber sufrido en los alrededores de dicha localidad el pasado 18 de julio. El forense ha comentado que en su dictamen no puede certificar nada acerca de la agresión denunciada, ya que la prueba se ha realizado cinco meses más tarde, tiempo más que suficiente para que las posibles secuelas de la violación hayan desaparecido.

Se da la circunstancia de que el examen médico, en teoría determinante para la comprobación de una violación, se ha efectuado después de que la joven haya pasado una semana en la cárcel y esté procesada en Murcia por un supuesto delito de aborto, realizado el pasado 13 de noviembre.

La joven indica que el embarazo fue consecuencia de la violación denunciada en Orihuela y, aunque el juzgado de la localidad alicantina envió un exhorto a Murcia con fecha del 31 de julio, para que se le realizase examen médico, hasta ahora no se había llevado a cabo.

El abogado Jaime Pérez, que actúa como acusador particular en las diligencias previas que se siguen en Orihuela, ha anunciado, por su parte, que pedirá como prueba de la supuesta violación, el análisis del feto que se conserva en la clínica maternal de la seguridad social de Murcia, donde Mari Carmen Olmo fue internada por la policía después de que, al parecer, una mujer le introdujera un líquido jabonoso en el útero, para interrumpir un embarazo de casi cuatro meses.

El acusador privado pretende demostrar de esta manera la redirecta entre violación y posterior embarazo de la denunciante.