Israel incrementa su influencia militar en América Central

Israel está ampliando sus misiones de entrenamiento militar y desempeñando el papel de principal sunministrador de armas a varios regímenes centroamericanos, según fuentes del Departamento de Estado y del espionaje norteamericano. Entre el armamento que ofrece Israel figuran partidas capturadas a las fuerzas palestinas en Líbano.

Armamento e instructores judíos están empleándose para combatir a las fuerzas antigubernamentales en Guatemala, Honduras, El Salvador y Costa Rica. Los funcionarios estadounidenses afirman asimismo que los israelíes están fortaleciendo los servicios de espionaje en Costa Rica y Guatemala y ampliando sus contactos militares con Honduras.Argentina, por su parte, está interesada también en comprar una gran cantidad de armamento israelí y equipo militar, como parte de su plan de rearme tras la derrota sufrida en la guerra de las Malvinas. Una estancia de tres días en Buenos Aires del ministro israelí de Exteriores, Isaac Shamir, puede haber puesto los cimientos de un importante contrato entre ambos Gobiernos.

Antes del conflicto de las Malvinas, Israel había suministrado al régimen de Buenos Aires 35 aviones de combate Dagger, una versión judía del cazabombardero francés Mirage III. Fuentes diplomáticas en la capital argentina señalan que el régimen militar considera a Israel una pieza clave en sus planes para rearmarse.

Por lo que se refiere a los países centroamericanos, el volumen de armas suministradas y su tipo se considera sustancial para las dimensiones de las fuerzas de seguridad en esta zona del mundo. A título de ejemplo, la mayoría de la fuerza aérea hondureña consiste en aviones franceses montados por Israel, y la práctica totalidad de las fuerzas armadas guatemaltecas utilizan como arma reglamentaria los subfusiles Galil.

Según todas las indicaciones, los israelíes no están presentes en la zona, como los norteamericanos o los cubanos, participando en una forma más de la confrontación Este-Oeste, o para implicarse en luchas revolucionarias o contrarrevolucionarias. Israel, explican los funcionarios norteamericanos, actúa, como en Africa o en Suramérica, por sus propias razones: ampliar mercados, que le son fundamentales cara al fortalecimiento de su poderosa industria militar, y contrarrestar el aislamiento diplomático ocasionado por su lucha contra los países árabes.

Ningún funcionario israelí o estadounidense opina que Israel esté actuando en Centroamérica como propio destacado por Washington, o para ayudar a regímenes como el de Guatemala.

Según informaciones oficiales de Washington y Tel Aviv, Israel no informa a su aliado norteamericano de sus actividades militares o de inteligencia en la región. Estados Unidos, en consecuencia, tiene dificultades a veces para conocer las actividades judías. A pesar de ello, fuentes del Departamento de Estado han hecho saber que les parece bien la ayuda del Gobierno de Tel Aviv en esta zona, precisando que en cualquier caso no hay una estrategia conjunta de ambos Gobiernos.