La Diputación expedienta a 59 policías forales

La Diputación Foral de Navarra ha acordado instruir expediente disciplinario a 59 policías forales -de los ochenta que componen la plantilla-, que recientemente hicieron pública una nota en la que solicitaban que fuesen esclarecidos los hechos protagonizados, al parecer, por dos componentes de este cuerpo, escoltas del presidente de la Corporación, Juan Manuel Arza, en un bar de Cirauqui. Igualmente, la Diputación navarra ha aceptado la petición de baja del jefe de la Policía Foral, Luis Lezana, con el fin de que éste pueda reincorporarse a su antiguo puesto de capitán del Ejército.Ante los incidentes de Cirauqui, producidos en la madrugada del pasado 21 de noviembre, las dos arrendatarias del bar presentaron denuncia contra los dos policías forales de la guardia de escolta de Juan Manuel Arza, por agresiones verbales y físicas contra los clientes y personal que en aquellos momentos se encontraban en el establecimiento. Incluso uno de los policías forales, en evidente estado de embriaguez, según las denunciantes, golpeó con su pistola a un joven en la cabeza, que protestó porque, previamente, le habían llamado macarra. A raíz de esta denuncia, los dos policías forales, supuestos protagonistas de estos incidentes, fueron separados del servicio que desempeñaban y se les abrió expediente disciplinario.

Los 59 policías forales a los que la Diputación navarra ha acordado instruir expediente disciplinario son los que difundieron recientemente una nota en la que señalaban que, en caso de ser ciertos los incidentes, reprobaban este proceder y no se sentían, en modo alguno, identificados con los compañeros sancionados inicialmente. En su nota puntualizaban, asimismo, que esta actuación en caso de ser cierta, iría contra el espíritu y las funciones del cuerpo, por lo que, "como policías forales y como ciudadanos exigimos se adopten las medidas oportunas contra los responsables".

La publicación de esta nota, que ha dado origen al expediente, contra la mayor parte de los componentes de la Policía Foral, motivó, a su vez, un escrito del jefe de dicha policía ante la Diputación en el que calificaba la actuación de estos 59 miembros del cuerpo como contraria a la disciplina interna. Como consecuencia del escrito del jefe de la Policía Foral, la Diputación decidió, con el voto en contra de uno de sus diputados, instruir expediente contra los 59 firmantes de la nota, "por si la conducta de los mismos fuese constitutiva de falta disciplinaria, y para determinar las responsabilidades de esta naturaleza, con la correspondiente sanción que en su caso pudiera derivarse".