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Interrupción de la trayectoria negativa del mercado

La pronunciada trayectoria negativa que habían venido manteniendo los mercados nacionales de valores a lo largo de las últimas reuniones se quebró ayer como consecuencia de una fuerte reducción en el volumen de órdenes vendedoras que acudían a los corros y que generaban, como efecto inmediato, un cierto renacer de los tanteos compradores.El grupo bancario y el de sociedades de inversión presentaron las mayores pérdidas de las reuniones de ayer. El importante volumen de saldos vendedores que tenían acumulado el primero y los ejercicios de contención de pérdidas en las cotizaciones que se habían venido realizando en las últimas durante sesiones anteriores fueron las causas por las que, en opinión de algunos de los más cualificados especialistas, los responsables de estos valores aceptaron reajustes a la baja en los precios de los títulos encargados de su custodia. El efecto que se pretendía conseguir es el de limpiar fondos y plantear unas condiciones objetivas favorables para poder sumarse a tina hipotética reacción genérica del mercado.

Esta tesis parece cobrar un cierto cuerpo cuando se observa la evolución positiva del Banco Popular. Los precios de estos títulos habían observado fuertes recortes en las últimas reuniones, atendiendo posiblemente, con mayor rigor que el resto de sus compañeros, a los imperativos del mercado. Esta circunstancia, junto con la mayor firmeza que han mostrado los valores eléctricos, ha dado pie a que se extendiese una ligera brisa de esperanza entre los inversores (que, en definitiva, continúan mostrándose difícil mente asequibles al desánimo.

Del decreciente flujo de ventas se beneficiaron especialmente los precios de los derechos de suscripción, sobre los que se cernía un sombrío pleno de los más negros presagios. Los cupones de Sevillana consiguieron recuperar la peseta como precio de referencia, tras el susto que representó su cotización a setenta y cinco céntimos el pasado martes. El respiro resultaba extensible a todos los derechos de suscripción de empresas eléctricas, que en unos casos de forma. moderada, como era Hidrola, y en otros con algo más de intensidad, como sucedía en Viesgo, representó avances estratégicamente importantes en los precios de los mencionados derechos de suscripción.

El índice general de la Bolsa de Madrid fue el que registró en menor medida el aparente cambio de orientación del mercado. El repliegue de veinte centésimas que reflejaba le coloca en un nuevo valor mínimo del año. Sin embargo, tanto Bilbao como Valencia y, sobre todo, Barcelona consiguieron llegar al cierre de las reuniones presentando unos discretos balances positivos.

A pesar de que aún es demasiado pronto para poder establecer el alcance de la reacción que ayer protagonizó el mercado de acciones, existen algunos elementos, como especialmente es la sustancial reducción de los saldos vendedores en el grupo bancario, que sumaron unos 300.000 títulos, algo menos de la mitad que en las reuniones anteriores, que permiten pensar en que los operadores a corto plazo reinicien su actividad compradora en busca de rápidas diferencias positivas.

En la crónica de ayer, y debido a un error de transcripción, se citaba CEPSA, como sociedad que está próxima a realizar una ampliación de capital, cuando la compañía de que se trata es FECSA.

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