Francia levanta el embargo sobre la colección privada de Salvador Dalí

Las autoridades francesas levantaron ayer el embargo judicial de la colección privada del pintor Salvador Dalí, como consecuencia de la retirada de las reclamaciones hereditarias de Cecile Eluard, hija del poeta Paul Eluard y Helena Deltwina Diakonoff (Gala). esposa y musa del artista, con el que convivió desde 1929 hasta su muerte.

Cecile Eluard, a quien su madre repudió incluso por escrito, intentó durante el verano pasado iniciar un proceso judicial para que se la declarara heredera universal de Gala, aunque retiró su demanda tras una reunión mantenida en Saint Tropez con Miguel Doménech, abogado de Dalí en España (ver EL PAIS del 25-10-82).En compensación por el cambio de actitud, Ceciile Eluard recibirá una importante suma de dinero, los objetos personales de su padre, que Gala conservó tras su separación, y algunas obras de arte, entre las que figura el importantísimo Retrato de Paul Eluard, una de las grandes obras del surrealismo, pintada por Dalí en 1929. Esta tela se encuentra actualmente almacenada en el puerto franco de Ginebra, junto al grueso de la Colección Gala, compuesta por 65 obras, valoradas en más de 2.500 millones de pesetas, que viajará a España a principios de enero, para ser expuesta en la muestra antológica del pintor de Port Lligat.

Dinero a cambio de las obras

El propio abogado de Cecile Eluard, Juan Ailtonio Cremades, confirmó ayer la retirada de las medidas de cautela adoptadas en Francia sobre la herencia de Gala, reconociendo que su cliente cede a Salvador Dalí todos los derechos de la herencia de Gala "a cambio de la entrega de los efectos personales de ésta y de su familia, de algunos cuadros y de una cantidad de dinero", informa Efe.El embargo era, en realidad, una medida simbólica, según explicó a EL PAIS el pintor Antonio Pichot, íntimo colaborador de Dalí. "Las obras son propiedad de Dalí", explicó, "y al estar depositadas en un puerto franco, puede disponer de ellas libremente sin que ninguna autoridad judicial tenga armas para impedírselo". La misma fuente confirmó que las 65 obras viajarán a Madrid en cuanto el pintor decida cuáles deben ser colgadas en la muestra antológica, tras lo cual serán trasladadas a Barcelona y Figueres, donde, con toda probabilidad, quedarán ya expuestas definitivamente, por expreso deseo del Divino.

El abogado de Cecile Eluard afirmó que se había evitado un "pleito largo y complicado, como lo hacía presagiar el conflicto de leyes originado por las varias nacionalidades de Gala, el matrimonio de los cónyuges en el extranjero, su residencia en distintos países y el depósito de las obras de Dalí también en diferentes naciones". La complejidad del proceso judicial es la que decidió a los abogados de Dalí a negociar con la hija de Gala, a pesar de que ésta no tenía ninguna opción, a causa de los documentos legales existentes en España, según los cuales Dalí y Gala se hacían donación mutua de todos sus bienes.

Para el pueblo español

Cecile, casada y con tres hijos, experta en libros antiguos, declaró ayer en París: "Para mí ha sido un grato deber cumplir la última voluntad de mi madre y permitir que la obra pictórica de Salvador Dalí vaya al pueblo español". Al explicar su decisión de renunciar a la demanda, la única hija de Gala estimó "haber hecho importantes concesiones morales y materiales en consideración a la memoria de mis padres y en homenaje a la obra de Dalí, al pueblo español y a todos sus artistas". "Cuando supe que la última voluntad de mi madre era que toda la obra de Dalí fuera a parar al Estado español y a la Generalitat de Cataluña", añadió Cecile Eluard, "acepté reducir mis derechos legitimarios sobre las pinturas". La hija del poeta inauguró ayer en París la exposición Paul Eluard y los pintores de su tiempo.En opinión de Cremades, "la inhabitual rapidez con que se ha logrado un acuerdo definitivo entre Cecile Eluard y Dalí demuestra que ambas partes han actuado con mesura y responsabilidad".