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Domingo Solís, sin posibilidad de salir en libertad bajo fianza

Domingo Solís Ruiz, su hijo Felipe Solís Pérez y Ricardo Cruz Tuñón se encuentran en prisión provisional, sin posibilidad de libertad bajo fianza, por decisión tomada por el Juzgado número 3 de la Audiencia Nacional por presuntos delitos monetarios, según el auto de procesamiento dictado contra ellos. Los tres se encuentran incomunicados en la sexta galería de la prisión de Carabanchel. El director de la misma señaló ayer que Domingo Solís, tras el reconocimiento médico al que ha sido sometido, tendrá que seguir tratamiento. El juez requiere a los procesados para que presten fianzas de 1.460 millones, 2.710 millones y 2.700 millones de pesetas, respectivamente, para asegurar las responsabilidades monetarias que fueran procedentes.De las actuaciones practicadas por el juez instructor se desprende que en la UTECO de Jaén que presidía Domingo Solís, se vino produciendo un almacenamiento de aceite que, por el volumen inusitado que alcanzó en 1977, tenía difícil venta en los mercados nacionales. Para resolver esta situación, y con conocimiento del Consejo Rector de UTECO, los tres procesados convinieron con la sociedad francesa Frahuil unos contratos denominados de cuenta social, consistentes en la exportación de aceite por UTECO y con cargo a la financiación obtenida en el extranjero hasta el momento real de la venta. Se estableció que, en el caso de que se produjeran beneficios en función de un hipotético sobreprecio del aceite respecto al fijado en las licencias de exportación, los beneficios se repartirían al 50%.

A través del convenio entre UTECO y Frahuil se suscribieron tres protocolos concernientes a un total de 7 1.000 toneladas de aceite de oliva, por un valor total de 7.022 millones de pesetas. Las ventas se hicieron sobre licencias de exportación de ventas en firme, remitiéndose a España las divisas correspondientes, sin incluir las correspondientes al sobreprecio que correspondía a UTECO, unos 1.500 millones de pesetas. Las buenas relaciones entre ambas empresas hicieron que se planteara la creación de una sociedad mixta, Sofranex, en la que Domingo y Felipe Solís ocupan los cargos de presidente del Consejo de Administración y director general.

Dinero en Marsella

La autorización para la formalización de esta empresa se consigue, y en enero de 1979 se envían 42 millones de pesetas como aportación de UTECO al capital de la empresa; hasta julio de 1981 no se formaliza la creación de la empresa, y mientras tanto, el dinero de UTECO se encuentra colocado en una cuenta de Marsella, que genera unos beneficios de unos ocho millones de pesetas. Estos intereses no fueron repatriados a España.El retraso en la constitución de Sofranex provocó que UTECO se viera abocada a contraer préstamos con la Union Méditerranée de Banques por un valor aproximado de 1.250 millones de pesetas, garantizados con casi 10.000 toneladas de aceite, almacenadas en distintos sitios de España.

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