No es probable que el PSC apoye la moción de censura de los comunistas contra Pujol
La comisión ejecutiva del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC-PSOE) ha sido convocada para hoy con carácter extraordinario para estudiar la moción de censura presentada por la minoría comunista en el Parlamento autónomo catalán contra el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. La opinión imperante en la dirección socialista es contraria a apoyar esta moción, que propone al independiente Josep Benet como nuevo presidente. Tampoco es probable que presenten los socialistas una moción alternativa proponiendo un candidato propio, opción con más posibilidades de éxito que la anterior. Unas declaraciones efectuadas ayer por el primer secretario del PSC-PSOE, Joan Reventós, apuntaban en esa dirección.
Curiosamente, son los diputados del Centro Democrático y Social los que con mayor simpatía han acogido la moción de censura, que califican de "pertinente, pero precipitada". Los parlamentarios suaristas tienen previsto reunirse el próximo lunes para estudiar la situación, pero la inexistencia de una dirección del partido en Cataluña -sólo hay gestoras provinciales- hace muy difícil la adopción de una decisión estratégica.Dirigentes del Centro Democrático Social consultados por EL PAIS discrepan en cuanto a la actitud a adoptar: mientras hay quien es partidario de apoyar una moción alternativa de los socialistas, si éstos acabaran por presentarla, otros prefieren mantenerse al margen y posponer una solución definitiva a la crisis del Gobierno catalán hasta después de las elecciones legislativas del próximo 28 de octubre.
Los ocho diputados -del CDS en el Parlamento catalán son decisivos para obtener la mayoría absoluta de 68 votos, que, se puede alcanzar sumando los sufragios socialistas, comunistas del PSUC, comunistas del PCC (escindidos del partido anterior), andalucistas y el propio CDS.
"Posiblemente nos abstendremos, pero dejando bien claro que esos 68 votos que ahora no se alcanzarán podrán obtenerse una vez celebradas las elecciones generales", declaró ayer el portavoz del CDS en el Parlamento autónomo, Santiago Guillén. Aunque la moción comunista fracase, las distintas fuentes consultadas coinciden en que es muy difícil. que pueda sobrevivir la actual fórmula política que sostiene al Gobierno minoritario de Jordi Pujol.
La alianza entre Convergencia i Unió, Esquerra Republicana y Centristes de Catalunya-UCD no tiene ya la mayoría en el Parlamento desde la escisión suarista, y este último grupo coincide con socialistas y comunistas en la necesidad del alcanzar una fórmula de gobierno más estable y mayoritaria.
Debilidad política
El primer secretario del PSC-PSOE, Joan Reventós, declaró ayer que "cada día que pasa, el Gobierno que presie Jordi Pujol demuestra su debilidad política, y esta debilidad perjudica a la Generalitat de Cataluña. Un Gobierno minoritario, falto de un apoyo parlamentario estable, puede caer en cualquier momento. Los socialistas hemos dicho muchas veces que la única forma posible de seguir adelante es conseguir una mayoría alternativa y amplia, que realmente permita una modificación total de la política de la Generalitat y un trabajo eficaz en el Parlamento".Aunque Reventés señala que "ahora más que nunca hay que ir hacia la creación de una mayoría prlamentaria alternativa y amplia, capaz de fortalecer la autonomía de Cataluña y su Gobierno", desautoriza a continuación la moción presentada por los comunistas, quienes, afirma, "no son una alternativa de gobierno", y habrían presentado la moción de censura "buscando un gesto para atraer la atención". "Pero no es bueno jugar con la gobernabilidad de Cataluña intentado instrumentalizar al Parlamento durante un período electoral, y menos aún cuando ' éste afecta a las Cortes generales del Estado", añade Reventós.
Dirigentes comunistas consultados ayer afirmaron estar abiertos a una moción alternativa formulada por el PSC-PSOE y dispuestos a votarla junto con la por ellos presentada. Josep Benet, que, aunque independiente, encabezó la candidatura del PSUC por Barcelona en las elecciones autonómicas, con un programa basado en la constitución de un Consejo Ejecutivo de unidad de todas las fuerzas democráticas, ofrecerá ahora la misma alternativa. Ayer se iniciaron los contactos entre dirigentes comunistas y sus hipotéticos aliados.
La moción de censura, planteada en período electoral, no era deseada por ningún partido, salvo el PSUC, porque les obliga a definir la política de alianzas en un momento en que lo aconsejable es ocultarla.
