El Gobierno francés presenta un informe sobre los problemas que plantea la adhesión de España a la CEE

,El Gobierno francés ha enviado a la Comisión Europea -órgano ejecutivo y burocrático de la Comunidad Económica Europea (CEE)- un informe en el que se enumeran una vez más, de forma detallada, los problemas que plantea la adhesión de España al Mercado Común. El documento contiene escasos elementos nuevos y se limita fundamentalmente a reiterar posiciones ya conocidas.El memorándum está acompañado por una carta personal del presidente de la República, Frangois Mitterrand, quien explica la posición de su Gobierno en los mismos términos en que lo hizo en la cumbre europea del pasado mes de junio. Mitterrand señala que Francia no se opone a la ampliación de la CEE, pero que la adhesión de España y de Portugal supondrá un coste adicional para el ya exiguo presupuesto de la Comunidad. Ese coste adicional debe ser repartido equitativamente y no recaer sobre los países más afectados por la ampliación, Francia entre ellos.

Para el presidente de la República Francesa, la ampliación no podrá realizarse mientras que no se hayan encontrado soluciones a los problemas enumerados, soluciones que deben ser apoyadas por los diez Estados que son miembros en la actualidad, y aceptadas como acervo comunitario por los países candidatos.

Como única novedad existe una mención a la necesidad de reflexionar.sobre la reforma en la que los dos candidatos podrían ser asociados a las discusiones sobre las reformas, aunque no se propone ninguna fórmula y se exige, en cambio, que España y Portugal se sometan desde ahora mismo a ciertas disciplinas comunitarias, lo que constituye una clara alusión a los problemas planteados actualmente por la siderurgia, la pesca y ciertos productos agrícolas.

El informe remitido por el Gobierno francés es la respuesta a la carta que envió el presidente de la comisión el pasado día 7 de julio a todos los Estados miembros, pidiéndoles que realizaran un memorándum de los problemas concretos que suscita la adhesión de España y Portugal. La Comisión se propone realizar con estos documentos el inventario que le reclamó la cumbre europea del pasado mes de junio a iniciativa del Gobierno de París, pero con la aprobación de los restantes países.

El problema de la financiación

El informe francés amplía los términos de la nota verbal que remitió el anterior Gobierno de París a la comisión hace casi dos años. La tesis fundamental del estudio es que la ampliación, si se realiza en las condiciones actuales, exigirá distraer fondos en detrimento de políticas comunes en vigor, ya que el presupuesto y el sistema de financiación de la CEE no deja un margen suficiente para sufragar los nuevos gastos. Francia considera inaceptable el recorte de los presupuestos en vigor, por lo que estima que hay que replantear toda la política presupuestaria y buscar nuevos sistemas de financiación que permitan superar el techo actual. Se trata de una evidente petición de que se aumente el techo del 1% del impuesto del valor añadido (IVA), que se destina a las arcas de la CEE.

En cuanto al capítulo agrícola, la espina de la adhesíón de Espafía, el informe francés maneja las cifras ya conocidas: España puede aumentar su producción de frutas y legumbres en "los próximos veinte años" en siete millones de toneladas, produce más de cuarenta millones de hectolitros de vino, es el primer productor del mundo de aceite de oliva... Para contrarrestar el impacto de la adhesión española, Francia afirma que hay que modificar la reglamentación del sector de frutas y legumbres, estudiar el potencial de cada país, establecer fórmulas para evitar los desequilibrios y "examinar los medios para orientar el potencial de producción hacia productos que son deficitarios en la CEE".

El informe no olvida el problema de la libre circulación de la mano de obra ni el de la flota pesquera española, especialmente en relación con el principio de libre acceso a las aguas comunitarias.