El primado de Polonia hace un llamamiento para la creación de sindicatos de agricultores

El primado de la Iglesia católica polaca, arzobispo Josef Glemp, ha hecho un llamamiento, ante unos 200.000 peregrinos, al diálogo entre el pueblo y las autoridades para eliminar el "odio existente", y ha proclamado el derecho de los agricultores a sindicarse. En la homilía pronunciada ayer con motivo de la fiesta de la Asunción, el primado no hizo referencias al sindicato Solidaridad ni a los incidentes, del viernes en las cuatro principales ciudades polacas. En Gdansk se vivió una jornada tranquila, con intensa vigilancia policial.

La homilía de Glemp fue pronunciada en el monasterio de Jasna Gora, de Czestochowa, ante la imagen de la Virgen Negra, patrona de Polonia, y en ella el arzobispo manifestó que "el campo necesita una organizción sindical. El derecho a organizarse es innato, y no puede ser otorgado ni impuesto"."Los agricultores", afirmó, "han de tener un sindicato que represente sus intereses, para que pueda instaurarse entre el productor y el comprador (en Polonia, el Estado) un diálogo que no descanse sólo en bases económicas, sino también humanas".

El apoyo de la Iglesia a un sindicato de agricultores, que en Polonia constituyen el 40% de la población, contrasta con el mutismo mantenido respecto a Solidaridad y a la actual situación polaca. Los observadores creen ver en esta actitud moderada un deseo de evitar que surjan dificultades en las negociaciones que la Iglesia y el Gobierno mantienen sobre la futura visita del papa Karol Wojtyla.

Calma vigilada

En Gdansk reinaba ayer la calma, vigilada estrechamente por patrullas políciales, reforzadas con los zomo (unidades antidisturbios de la milicia), que realizaban constantes identificaciones de transeúntes, en especial de los jóvenes.

En las inmediaciones de los astilleros Lenin, donde el número de patrullas policiales era mayor, se apreciaba un constante ir y venir de personas que se dirigían a poner flores ante el monumento en memoria de las víctimas de la revuelta obrera de 1970.

Solidaridad ha convocado para esta tarde una concentración ante este monumento para conmemorar el segundo aniversario de la constitución, en la capital báltica, de un comité interempresas para negociar con el Gobierno determinadas reivindicaciones laborales y la liberalización de los sindicatos.