Mayor tolerancia de Ia banca en el recorte de sus acciones

La suave tendencia declinante que favorece el estado inoperante del mercado actualmente, ha sido la carcaterística que ha definido el comportamiento de las bolsas españolas en la penúltima sesión de esta primera semana del mes de agosto.El mercado de acciones, experimentó un discreto empeoramiento, que fundamentalmente venía dado por la paulatina pérdida de convicción, o quizá simplemente la mayor tolerancia que están teniendo los bancos para con los recortes en el precio de sus aciones, frente a la firmeza, e incluso pujanza, que se les atribuía hace unas pocas sesiones.

El resto del mercado un día más quedó prácticamente inédito, tan sólo cabría ser resaltado la firmeza, inducida, con que las eléctricas están actuando estos últimos días. Por el momento parece que las órdenes compradoras que están llegando a los parqués son suficientes para hacer frente a una oferta titubeante, que no acaba de fijar con claridad sus objetivos, y que salta de un valor a otro sin solución de continuidad. Así, y en la bolsa madrileña, los valores punteros de este sector, como Hidrola o Unión Eléctrica avanzaban discretas posiciones, mientras que los que experimentaban diferencias negativas lo hacían también en porcentajes inferiores a un entero.

Pero volviendo con el grupo bancario, indiscutiblemente el único motor potencial con que cuentan actualmente los mercados de acciones, los especialistas han comenzado a considerar la posibilidad de que la creciente inestabilidad en el terreno político esté induciendo a los responsables de las políticas bursátiles de los grandes bancos, a plantear unas estrategias conservadoras, dando escaso espacio a las alegrías, y observando en cualquier caso una actitud espectante frente a lo que pueda pasar.

De todas formas aún es pronto para poder determinar si los bancos decididamente van a abandonar, las intenciones que en su día se les atribuyeron de generar mejoras en estos tranquilos días veraniegos.

Ayer la oferta en Madrid para el conjunto de los siete grandes bancos aumentó con relación a la cifra del día anterior. No obstante el Central consiguió, al fin, superar el 300%, apoyándose en un pequeño saldo comprador de 6.928 títulos, constituyéndose en el único que experimentó un avance en su cotización.

La cara opuesta de la moneda la daban Popular y Santander perdiendo tres puntos, cada uno, y esta última entidad presentando un saldo vendedor de 53.935 títulos, con lo que encabezó el cartel de los ofertados. El Hispano, que perdió un entero con algo menos de 10.000 títulos de diferencia entre el número de acciones que se le demandaba y los ofertados.

Afortunadamente para la tranquilidad de los veraneantes Telefónica arrimó el hombro de firme y con su subida de un punto y medio en el mercado de Madrid consiguió que el indicador general perdiese sólo cinco centésimas, aunque en realidad la sesión había resultado bastante más débil de lo que da a entender esta diferencia. Dentro precisamente de esta tónica de debilidad, destacó los recortes que se produjeron entre las cementeras y, constructoras, que desde primera hora de la mañana se vieron sometidos a apreciables tensiones vendedoras, llegando el cabeza de grupo, Dragados, a perder cinco puntos con relación a su posición anterior.