La Moncloa desmiente que Calvo Sotelo piense en una "remodelación ministerial, por ahora"
Aunque en la mayor parte de los ministerios reinaba ayer una gran confusión y el ambiente de crisis era palpable, fuentes de la Moncloa aseguraron que "no hay prevista ninguna remodelación ministerial, por ahora", y ofrecían una perspectiva de normalidad política, afirmando que Lepoldo Calvo Sotelo viajará, conforme a lo previsto, el próximo día 6 de agosto a Colombia y, probablemente, a Ecuador y Perú.
La falta de contactos políticos de Landelino Lavilla, quien permanece recluido en su despacho de las Cortes y apenas ha mantenido algunas conversaciones telefónicas con miembros de la oposición -como Santiago Carrillo-, provocaba ayer el mayor nerviosismo en la clase política, mientras los portavoces oficiales de varios departamentos, mínisteriales desmentían el rumor acerca del inmediato relevo de sus titulares.Así ocurrió con el vicepresidente económico del Gobierno, Juan Antonio García Díez, quien el miércoles mantuvo una larga conversación con Calvo Sotelo en la Moncloa, y al que todos consideraban prácticamente dimitido. Pero la salida del socialdemócrata García Díez parece haberse aplazado "hasta que se conozcan los datos fundamentales", es decir, los pasos que piensan dar Adolfo Suárez y Landelino Lavilla.
También en el Ministerio de Asuntos Exteriores se desmintió que existiese ninguna certeza en torno a la sustitución de José Pedro Pérez Llorca: "Sería muy difícil encontrar otro ministro para que actuase durante sólo tres meses". Sin embargo, el propio Pérez Llorca se muestra escéptico, en privado, sobre su continuidad en el Gabinete, y ayer aseguraba a un diplomático que "a lo mejor, la semana que viene no estoy sentado aquí y estarás tú en mi lugar".
Todo hace pensar que, pese a los desmentidos de círculos muy próximos a Calvo Sotelo, habrá remodelación, y ésta será amplia, aunque pueda no ser tan inmediata como algunos círculos pensaron inicialmente. Democristianos y liberales, ahora predominantes en UCD, presionan en este sentido.
Nerviosismo en la sede central UCD
Si el nerviosismo en los ministerios es grande, especialmente en ciertas áreas del equipo económico, no es menor en la sede central de UCD, en la calle de Arlabán, que el miércoles fue visitada por Lavilla. El nuevo presidente del partido conversó durante casi dos horas con el secretario general, Iñigo Cavero, quien una vez más puso su cargo a disposición del máximo dirigente.Dado que la continuidad de Cavero al frente del aparato de UCD parece bastante dudosa, las distintas familias centristas han vuelto a lanzarse a la lucha por el poder. Hasta cuatro nombres diferentes, pertenecientes a otros tantos "sectores" centristas se filtraban ayer en los medios informativos como candidatos al cargo de secretario general: el liberal Luis Miguel Enciso, el socialdemócrata Santiago Rodríguez Miranda (ministro de Trabajo), el también socialdemócrata y ex suarista Rafael Arias-Salgado (ministro de Administración Territorial) y el democristiano Juan Anntonio Ortega Díaz-Ambrona, acaso el que cuenta, por su proximidad a Lavilla y sus características personales, con mayor número de posibilidades.
Las tres incógnitas
Adolfo Suárez, una de las grandes incógnitas de la crisis, no adelantará, según manifestaron ayer en su despacho, su regreso de Venezuela, pese al accidente automovilístico sufrido en Granada por su hijo Javier. Suárez se negó, tanto a su salida de Madrid como a su llegada a Caracas, a comentar su situación personal dentro de UCD y aplazó cualquier respuesta hasta su regreso, el lunes, a España. Se limitó a elogiar al PSOE y a recalcar que UCD ha sufrido el desgaste gubernamental propio de una gestión pública en medio de una crisis económica europea. Otra gran incógnita de la crisis consiste en saber cuántas fugas significativas registrará el partido en el Gobierno. Casi una treintena de parlamentarios, entre diputados y senadores, se reunieron anteanoche en una cena con Oscar Alzaga, el máximo animador del Partido Demócrata Popular, de inspiración democristiana y cuyo proyecto es formar una coalición con Alianza Popular. Entre los asistentes a la cena se encontraban personas consideradas muy próximas a Lavilla, como eI diputado madrileño Jose Luis Ruiz Navarro, quien compartió la creación del grupo "Tácito" con el hoy presidente de UCD.Ayer se reunieron en Madrid representantes de las Juventudes Centristas de diecisiete provincias. Los delegados de catorce de ellas llegaron al acuerdo inicial de integrarse en el PDP, que el próximo día 21 se presentará, con los diputados Alzaga, Vega Escandón y Buiz Navarro a la cabeza, a los medios informativos.
La tercera gran incógnita es la posición que adoptarán finalmente los llamados azules frente al eje democristianos-liberales, consolidado a raíz de la elección de Lavilla como presidente. Por el momento, en la vicepresidencia política que ostenta Rodolfo Martín Villa se presienten "aires de cambio", lo mismo que en el Ministerio del Interior, de Juan José Rosón.
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