Las regiones pirenaicas de España y Francia solicitan la reapertura del ferrocarril de Cafranc

El restablecimiento de. la línea ferrocarril Pau-Canfranc- Zaragoza, cerrada al tráfico internacional desde el año 1970, es la propuesta de acción más concreta que ha salido de la primera Conferencia de Regiones Pirenaicas clausurado ayer en la ciudad de Jaca (Huesca). La declaración final, que considera el proyecto no sólo necesario sino también posible, tiene en cuenta que es la parte central del Pirineo la que, dentro de las carencias que soportan las áreas de montaña, se encuentra particularmente infraequipada. En la sesión de ayer intervino el presidente de la Generalidad de Cataluña, Jordi

Por lo demás los resultados de la conferencia de Jaca son más una declaración de principios que una delimitación de acciones. Aunque ese no fuera su objetivo, ya que por su carácter la conferencia no es vinculante para los gobiernos, se ha huído deliberadamente de los asuntos conflictivos, suprimiendo páginas enteras de la propuesta de conclusiones a la definitiva. Así, en lugar de la concreción de los ejes de carreteras transpirenaicos -expuestas exhaustivamente en la ponencia correspondiente- se limita a recomendar que se establezca una red coherente, teniendo en cuenta a todo el Pirineo y tanto en el sentido norte-sur como en el de este-oeste. Ideas sobre desarrollo y equilibrio europeo, se incluyen en el contexto.La conferencia propugna la creación de una comunidad de trabajo de las regiones pirenaicas, a quien remite el estudio y decisión de los proyectos comunes. Es lo que en definitiva hizo la del Arco Alpino celebrada en Lugano en 1978, de donde partió la idea de hacer algo similar en los Pirineos y que ha logrado ciertas materializaciones prácticas aunque no muy espectaculares. A esta comunidad, la conferencia la cita para una próxima reunión antes de que concluya el presente año.

Otra recomendación puntual que daría más operatividad a cualquier acuerdo, es la que pide a los gobiernos francés y español que estudien a la mayor brevedad posible su adscripción al convenio marco del Consejo de Europa sobre cooperación transfronteriza. Les recuerda que éste se encuentra abierto a la firma desde mayo de 1980, sin que los ejecutivos de ninguno de los dos países lo hayan suscrito como lo han hecho ya otros estados miembros.

La conferencia declara que los Pirineos cumplen una función de nexo entre el norte y el sur de Europa y solicita -también a los gobiernos- una nueva estrategia del desarrollo regional. "Las zonas periféricas sufren un retraso respecto al centro y sus recursos son infrautilizados", manifiesta, "y el reequilibrio pasa así mismo por poner un freno al desarrollo anárquico de ciertas zonas".

Los problemas específicos de las áreas de montaña también requieren soluciones urgentes, señalan las conclusiones de la Conferencia, y hay que hacer notar aquí que los alcaldes de municipios de montaña se quejaron del enfoque urbano que en cierto modo ha tenido esta reunión cuando en definitiva se trataba de hablar de los Pirineos. La potenciación de la agricultura, el turismo y el resto de la actividad económica se citan como acciones prioritarias. Se solicitan adernás ayudas financieras públicas a las, respectivas comunidades, se menciona que el capital de agua dulce de los Pirineos (regalíos y pantanos para la producción hidroeléctrica) debe ser explotado racionalmente, teniendo en cuenta no sólo el interés general sino el de las poblaciones afectadas. La propuesta de creación de un centro de encuentro de culturas pirenaicas en Andorra y la designación de Jaca como sede de la comunidad de trabajo, son también inciativas a destacar.

Leve polémica

La otra cara de la conferencia estaba en la tensión existente entre las delegaciones catalana y aragonesa. Cuando en la mañana de ayer llegó a Jaca el presidente de la Generalidad de Cataluña, Jordi Pujol, el de la Diputación General de Aragón, Gaspar Castellano, no se encontraba en la ciudad, se había trasladado a la localidad zaragozana de Daroca a presidir la procesión de los Corporales.Pujol, en presencia del vicepresidente del organismo preautonómico, aragonés y de una escasisima representación de esta delegación, saludó en castellano y francés a los presentes y a continuación pronunció en catalán todo su parlamento que recibiría después acusaciones de defenser los intereses exclusivos de Cataluña. En una conferencia de Prensa, diría después: "yo, no he visto ninguna tensión, he estado aquí, he hablado en catalán y no ha pasado nada". Jordi Pujol lamentó no haber podido saludar a Castellano, expresó su deseo de ir a Zaragoza a visitarle antes del verano y excusó su ausencia -criticada entre los propios aragones- diciendo que era normal, por las obligaciones inaplazables de su cargo. Cuando el presidente catalán salía del palacio de congresos de Jaca, llegó el aragonés y ambos se saludaron con un abrazo.

La delegación de Andorra, convocó a los informadores para explicar que el catalán era idioma oficial de la conferencia en atención del Consejo de Europa al principado y que los gastos del servicio de traducciones los había costeado Andorra.