Desilución en Italia por el juego de su selección
En medio de importantes medidas de seguridad, la selección italiana va consumiendo el período de aclimatación en Pontevedra, alternando las estancias en el parador nacional con los entretenimientos vespertinos en el estadio de Pasarón y algunos, pocos, paseos por las calles de la capital de la provincia, fuera de eso, la apariencia de Pontevedra es la normal en estas fechas preveraniegas. La prensa deportiva italiana se encuentra entre la indignación y la desilusión, tras el encuentro disputado contra el Braga. Bearzot dice que quedan siete días para mejorar muchas cosas.Mientras tanto, en Vigo se han agotado ya las 2.000 nuevas entradas que ayer fueron puestas a la venta, con lo que suman ya unas 7.000 las que puestas a la venta. Las localidades, que se venden en paquetes de tres -una para cada partido-, se agotan en pocas horas, a pesar de que nadie puede adquirir de una sola vez más de dos de esos, paquetes. Las colas volvieron ayer a la central de espectáculos.
Siguen con ritmo febril las obras del estadio municipal de Balaídos, donde las dificultades no han desaparecido. A cinco días del primer partido, en la nueva grada de río, donde ha sido construida la tribuna de autoridades, servicios de Prensa y las principales dependencias del estadio, sólo se cuenta con la luz de obra, puesto que Fenosa continua negándose a proporcionar toda la energía que precisa, con el fin de presionar al Ayuntamiento para que acelere el pago de una deuda que asciende a tinos 140 millones de pesetas, correspondiente a un trimestre, aproximadamente, del contrato entre aquella empresa y el Ayuntamiento para el suministro a la ciudad.
Aunque las medidas de seguridad ciudadana no se advierten más que en los controles de carreteras, el despliegue es importante. En medios policiales se estimaba que unas 10.000 prostitutas podrían caerse por aquí para reforzar los efectivos disponibles.
El caso es que la situación en Vigo de esta actividad es bastante crítica, porque existe una fuerte competencia extranjera, casi exclusivamente de súbditas portuguesas, que aprovechan las facilidades de tránsito por la frontera y llegan a Vigo como turistas, ocupando una parte importante del negocio, sobre todo en el barrio chino de La Herrería.
Esta modalidad de turismo ha obligado a una mayor intensidad de las acciones policiales, que llevan a cabo redadas con más frecuencia en La Herrería, mientras los propietarios de bares y establecimientos hosteleros de este barrio se quejan de que no son tratados con la misma disciplina que otros establecimientos en los que las chicas figuran como camareras o se les respeta más su condición de clientes. Todo un mundo.
Llegó Polonia
A las 15.00 horas llegó a Santiago de Compostela la selección polaca. El seleccionador manifestó que Brasil es el favorito y que en el mundial predominará la técnica sobre la fuerza. No quiso corrientar la ausencia de Jarecki, que. se quedó en la RFA.
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