Los directores de la CECA creen que el PSOE no aplicará su programa sobre cajas de ahorro
A una semana de la asamblea general que nombrará presidente y otros cargos en la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA), los directores de la entidad declararon ayer que los socialistas no quieren convertir las cajas en sociedades anónimas de capital público, como indica el programa de su último congreso.
Las relaciones con un PSOE que pudiera ganar las próximas elecciones generales no serán, sin embargo, el único reto de los nuevos rectores de la CECA. Deberán también pilotar la dificil adaptación de este tercio del sistema financiero, todavía en proceso electoral, ante el proceso liberalizador ya en marcha.Hasta ayer se ha dado por segura la candidatura del actual presidente, José Joaquín Sancho Dronda, y por posible la de José Luis Rubio Biseda, director general de la Caja Municipal de Bilbao, considerado hombre afín al ex ministro y presidente del Partido de Acción Democrática (PAD), Francisco Fernández Ordóñez. Pero los candidatos pueden presentarse o ser propuestos en la misma asamblea, que se desarrollará de lunes a miércoles próximos.
Como cada caja tiene un voto en la Asamblea y la gran mayoría de los electores no ha cambiado, casi todos los pronósticos se inclinan por la reelección de Sancho Dronda, procedente de la Caja de Ahorros de Zaragoza, Aragón y Rioja, y que lleva seis años en el cargo, para el que la vez anterior no tuvo competidor.
En medios de las cajas se indica que durante su mandato se ha consolidado en la CECA un triángulo de poder. Por línea político-profesional, Sancho Dronda y Miguel Allué Escudero, director general, también zaragozano, estarían en el centro; en la izquierda relativa, el ex vicepresidente económico, Enrique Fuentes Quintana, y sus colaboradores del Servicio de Estudios; en la derecha, que algunos vinculan a la ultraderecha política, lo que rechaza el interesado, Luis Coronel de Palma, marqués de Tejada, ex gobernador del Banco de España, presidente de la Confederación Católica de Padres de Familia y embajador en México en los setenta.
Preocupación, no terror
En este contexto, y al presentar ayer a un grupo de periodistas el contenido ole la asamblea general, Coronel de Palma y Allué Escudero dijeron que los dirigentes socialistas con quienes se han reunido en los últimos meses (Felipe González, Enrique Barón y otros expertos económicos) les han desmentido que el PSOE tenga el propósito de convertir desde el poder a las cajas en sociedades anónimas de capital público. Ante la observación de que el programa aprobado en el último congreso del PSOE, Allué precisó que "lo han desmentido totalmente" con la explicación de que fue introducido en el programa como un desliz de madrugada. El marqués de Tejada reafirmó su confianza en que no les van a engañar, para añadir: "Nos dijeron que había que estudiarlo. En ningún país del mundo las cajas son otra cosa que fundaciones, de las corporaciones locales, y de beneficencia".Previamente, Coronel de Palma había indicado que la hipotética victoria socialista no les infunde terror, sino preocupación. "El PSOE", añadió, "quiere que las cajas sean muy cajas, se dediquen más a las regiones -yo opino lo mismo-, que ayuden a las corporaciones locales -lo vienen haciendo-. Y todos debemos tener presente que el depositante no puede ser castigado en su remuneración por las mayores obligaciones de las cajas".
De otro lado, las cuatro ponencias que serán presentadas a la asamblea versarán sobre reclamación de igualdad de oportunidades ante la concurrencia y posición de las cajas ante la financiación de la vivienda y ante el paro y el déficit público, con el añadido de un estudio sobre el sector exterior.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.