Setenta millones para indemnizar las matanzas tratadas con aceite tóxico

Las indemnizaciones por los productos de matanza que fueron tratados con aceite tóxico alcanzan la cifra de setenta millones de pesetas, según han señalado fuentes del Ministerio de Agricultura a Europa Press. Dicha cantidad está destinada a compensar la pérdida de cerca de 200.000 kilogramos de embutidos y otros productos que entregaron los vecinos de los pueblos donde fue distribuido aceite sospechoso de estar adulterado, especialmente en las provincias de la cuenca del Duero y Extremadura.Aproximadamente cincuenta millones de pesetas han sido pagados ya por la Administración por este concepto, es decir, el 70 % de la cifra total prevista. Cada unidad familiar ha recibido o recibirá por término medio, según la misma previsión, unas 7.000 pesetas a cambio de los productos entregados.

Por otra parte, medio millón de litros de aceite tóxico habían sido recogidos el martes pasado durante la última operación de canje, iniciada el pasado día 4. Las fuentes citadas estiman que esta cifra se habrá duplicado a finales de mes. En operaciones- anteriores se habían recogido tres millones de litros.

El Servicio Nacional de Productos Agrarios (SENPA) empezará en junio la última entrega de aceite de oliva, de un grado de acidez, a las familias que se desprendieron del aceite tóxico. Igualmente, será entregada la compensación económica a los comerciantes que habían adquirido partidas de dicho aceite y lo entregaron en su día. Estos, recibirán la cantidad que figure en sus facturas de compra o, si no dispusieran de las mismas, les serán abonadas pesetas por cada litro entregado, según las mismas fuentes ministeriales.

Traslado de productos

Al haber desaparecido la Comisaría General de Abastecimientos y Transportes, correspondió al SENPA comenzar, el pasado 4 de mayo, el traslado a Madrid de los productos de matanzas tratados con aceite presuntamente tóxico, desde los municipios en donde habían sido recogidos.

El martes pasado habían sido trasladados ya unos 50.000 kilos de dichos productos en recipientes especiales con boca ancha y cierre hermético, con una capacidad de 60 litros cada uno, de los que el SENPA ha adquirido 8.000 unidades.

Estos mismos recipientes servirán para almacenar los alimentos recogidos, hasta que el organismo correspondiente de la Administración decida su destino y, en caso de que deban ser destruidos, la fecha, el lugar y la manera de hacerlo sin peligro.