2.000 agricultores, afectados por la huida del empresario Lizarraga
Entre los acreedores de Miguel Lizarraga Iraola, presidente de Convergencia Navarra (partido que recientemente anunció su federación con AP), en paradero desconocido, dejando presumiblemente tras de sí una deuda de unos 220 millones de pesetas, se encuentra la cooperativa provincial de ganado porcino, que agrupa a más de 2.000 ganaderos de Navarra, y además están diecisiete bancos y una fábrica de piensos.El consejo rector de la citada cooperativa, en una nota hecha pública ayer, da cuenta de que el empresario Miguel Lizarraga compró a los ganaderos, a través de la cooperativa, un cuantioso número de cabezas de ganado porcino para engorde, por un importe aproximado de dieciséis millones de pesetas.
En el contrato que los ganaderos tienen establecido con Miguel Lizarraga se señaló que el precio de venta sería satisfecho por medio de talones bancarios y que, en caso de existir problemas, los ganaderos podrían retirar las cabezas de ganado."Ante esta actuación nuestra", dice la nota de la cooperativa, "las entidades bancarias acreedoras y algún otro acreedor particular han amenazado con interponer querellas criminales contra los ganaderos si no se devuelve el ganado, ya que consideran nuestra forma de proceder como delictiva".
Para los ganaderos navarros resulta cómico que por algunos acreedores se haya pretendido considerar nuestra actitud como delictiva, cuando, en definitiva, se trata de defender los intereses de 2.000 familias cuyo principal medio de vida es la venta de ganado".
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