_
_
_
_
Gente

Ana Belén,

la actriz que durante los años de la transición era "la sonrisa del PCE", cortó el domingo pasado la tarta que celebraba el décimo cumpleaños de la discoteca Bocaccio, un lugar que fue definido por el poeta Luis Antonio de Villena, en un corto e improvisado pregón de felicidades como "esa cueva de las Nereidas donde a veces nos cobijamos los que andamos dando tumbos por la noche madrileña". Por ahí andaban novelistas como Gonzalo Suárez, gente de televisión como Fernando G. Tola, y naturalmente, en la mesa de Maruja Torres, Víctor Manuel que fue el segundo en probar el pastel de la celebración.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_