Protestas de los minoristas leoneses por una supuesta persecución de la inspección alimentaria

Los minoristas leoneses del sector de alimentación decidieron el sábado en una asamblea llevar directamente sus protestas al Gobierno Civil por lo que consideran una campaña de desprestigio y de persecución por parte de los servicios de inspección alimentaria, que, según ellos, pretenden crear una cortina de humo para ocultar a la opinión pública el tema del aceite tóxico multiplicando "tres o cuatro veces" las sanciones a los pequeños comerciantes.Según el presidente de la patronal de minoristas, Manuel Matilla, no puede descartarse un cierre general de las tiendas de comestibles si la Administración no atiende a sus peticiones. El mismo portavoz empresarial manifestó que "con unas intenciones nada claras se está insistiendo machaconamente en que el fraude sólo se produce en nuestros establecimientos", añadiendo que estas acusaciones han partido algunas veces de las propias autoridades. "Quizá con esta conducta", añadió, "lo que tratan es de ocultar otros problemas más importantes".

Los minoristas denuncian que muchas de las sanciones que les han sido impuestas desde la aparición del síndrome tóxico se basan en motivos insignificantes y que no revisten peligro para la salud.