Los niños autistas pueden llegar a curarse, según el Nobel Tinbergen

El niño autista no está condenado sin remedio, se dice en la lección magistral enviada por el premio Nobel profesor Tinbergen a la inauguración del VII Congreso Nacional de Psicología, que se celebra en Santiago de Compostela. La comunicación del profesor Tinbergen, que no pudo asistir por encontrarse enfermo, fue leída por el presidente de la Sociedad Española de Psicología, Mariano Yela.El etólogo holandés sostiene, informa Efe, que cuando "no se intenta siquiera curar a los autistas, se está condenando literalmente sin juicio a niños cuyo único crimen ha sido el de ser excepcionalmente sensibles y vulnerables y víctimas de experiencias traumáticas en una edad crítica".

Los niños autistas son físicamente normales y se caracterizan por retraimiento y anomalías graves en el comportamiento que conducen a retrasos en su desarrollo psicológico y mental. El autismo afecta aproximadamente a cuatro de cada 10.000 niños.

En los estudios realizados se han llegado a identificar más de veinte factores autismogénicos, entre los que Tinbergen cita el "ser hospitalizado a solas o separado posteriormente de la madre por cualquier otra causa".

El autismo se debe esencialmente, a una "sobreansiedad profundamente enraizada", y la mejor forma de combatirlo es concentrarse en tranquilizar al niño, amarlo y ayudarle a socializarse. El profesor Tinbergen analiza también el método del abrazo forzado aplicado por la psiquiatra norteamericana Martha Welch, y que consiste en que la madre toma al niño en su regazo como si fuera un bebé y lo sostiene firme pero blandamente, método al que atribuye resultados extraordinariamente positivos.

Las sesiones del congreso de psicología se prolongarán hasta el día 17, con una amplia variedad de temas; entre ellos, los procesos de razonamiento y memoria, la modificación de conducta, el aprendizaje del lenguaje y la deficiencia mental