El primer presidente de Cantabria manifestó su adhesión al Rey

José Antonio Rodríguez Martínez juró en la mañana de ayer su cargo como primer presidente de la Diputación Regional de Cantabria. En su discurso de aceptación señaló como principio irrenunciable el de "trabajar por y para Cantabria" en el convencimiento de que ello redundará en una "patria próspera y un Estado fuerte", lo que "favorece, igualmente, la consolidación de unas regiones libres, de progreso y bienestar".El presidente de la Asamblea Regional de Cantabria, Isaac Aja Muela, tomó juramento al primer presidente del Gobierno cántabro, tras la lectura del decreto real por el que fue sancionada su elección, efectuada por el plenario de diputados regionales cántabros el pasado 15 de marzo. En el acto, que se celebró en el patio del palacio regional y contó con la asistencia de la mayoría de los alcaldes de la región, así como representantes de la Administración del Estado, Rodríguez Martínez manifestó su adhesión, en su nombre y en el del pueblo de Cantabria, al Rey, "garantía", dijo, "de la unidad de la patria, de la libertad y de la justicia".

El presidente de la Diputación Regional reafirmó su intención de cumplir los objetivos marcados en el debate de investidura, a los que unió "el deseo de convivencia en el que Cantabria y su gobierno trabajarán intensamente". En cuanto a la composición de su Gobierno, que estará integrado por ocho consejeros (ver EL PAIS 18 de abril 1982), afirmó que "no responde a particularismos ni ejercerá exclusiones de ningún tipo. Viene a trabajar", añadió Rodríguez Martínez, "y a ilusionar a la Cantabria de todos, para lo cual necesitará de cuantas asistencias sean válidas para cumplir con éxito la gran tarea que tiene por delante". Para mañana, jueves, está previsto que tomen posesión de sus cargos los miembros del Consejo de Gobierno cántabro, quienes comparecerán, junto al presidente del Gobierno, ante la Asamblea Regional la próxima semana.