El Gobierno de Rabat, dispuesto a intensificar la colaboración hispano-marroquí
El rey Hassan II de Marruecos desea obtener el acuerdo de principio del rey Juan Carlos a sus intentos para lograr un verdadero salto hacia adelante en la cooperación global entre España y Marruecos. De acuerdo con fuentes marroquíes solventes, el monarca alauí aspira a una colaboración estrecha entre los dos países en todos los terrenos: desde el estratégico hasta el pesquero.La actual visita privada del monarca marroquí a Palma de Mallorca para entrevistarse con el rey Juan Carlos es, al parecer, el origen del retraso de las negociaciones sobre la pesca, que debían haber comenzado el pasado lunes 22 y que han sido pospuestas hasta el 8 de marzo.
El primer terreno de esta buscada cooperación es el estratégico. El rey Hassan II estima que el referéndum en el Sahara aceptado por él era su última carta en la vía de una solución negociada del conflicto. El rechazo de éste por el Polisario y Argelia hace temer en Marruecos que la única posibilidad sea ahora una escalada militar sin precedentes, con implicaciones internacionales nuevas.
La aparición de cohetes SAM-6 y tanques T-55 a finales del año pasado fue el primer indicio claro de la internalcionalización de la guerra. Los acuerdos militares posteriores del monarca con Estados Unidos, que todo s los observadores coinciden en apuntar que serán de mayor alcance que la simple concesión de facilidades, revelan, según se afirma en Rabat, la opción clara del monarca por el bloque que no le agrede. El mismo bloque, se añade, en que se encuentra España, que está llamada a jugar un papel destacado cuando ingrese en la OTAN.
Gibraltar y la costa atlántica
Las responsabilidades estratégicas compartidas o por compartir entre España y Marruecos conciernen no sólo al estrecho de Gibraltar, sino a la costa atlántica, en el ánimo de los marroquíes. En ella, la antigua Villa Cisneros, hoy Dajla, reúne todas las condiciones -frente a las Canarias- para convertirse en el futuro en un gigantesco portaviones estático.
La organización de una feria de la industria española en Marruecos, prevista para este año, es una idea original ya aceptada por los marroquíes, que apunta en ese sentido. Para el rey Hassan II, que tiene una visión mucho más ambiciosa de lo que puede ser la cooperación entre los dos países, esto no es más que un primer y tímido paso. La presencia en Palma de Mallorca junto al rey Hassan II de cuatro de los ministros de su Gobierno que mayor relación tienen con los asuntos españoles confirma la voluntad del monarca marroquí de rodearse para esta visita privada de los hombres más capacitados para vender ante e rey Juan Carlos su propuesta de intensificar la cooperación entre ambos países.
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