La sombra de Solidaridad, acompañará a Polonia

En 1974, Polonia se encaramó a la cima de las grandes selecciones mundiales, tras ganar los Juegos Olímpicos de Munich en 1972. Quedó en tercer lugar en el Campeonato del Mundo de Argentina, tras la República Federal de, Alemania y Holanda. Su fútbol ofensivo causó admiración y, desde entonces, es una selección digna de respeto. Su peregrinaje por el campeonato de Argentina fue discreto, y su reciente derrota ante la selección española (2-3) desmuestra que su trayectoria no es muy regular. Fechas antes a ese encuentro Polonia derrotó a Argentina en su feudo por 2-1. Desde 1980, Polonia ha vencido en seis ocasiones y ha perdido en cinco.La actuación de la selección polaca en las últimas fechas ha movido a diferentes comentarios. Su clasificación para el Mundial-82 no fue difícil. Dentro de los grupos europeos, el que le correspondió fue el único integrado por sólo tres selecciones, Polonia, República Democrática Alemana y Malta. 'La nula peligrosidad de Malta redujo la fase clasificatoria a un doble choque entre las dos primeras selecciones. Polonia resolvió bien y venció a la RDA en los dos encuentros (1-0 en Varsovia y 2-3 en terreno alemán).

Sin embargo, su actuación en encuentros internacionales amistosos no fue tan victoriosa. La RFA y España vencieron a los polacos en su propio terreno, por 0-2 y 2-3, respectivamente. Rumanía y Portugal, en sus estadios, también la derrotaron. Sólo Argentina sufrió con la selección polaca y cayó derrotada ante sus, propios seguidores.

Un seleccionador a gusto de todos

Piechniczek se hizo cargo de la selección ocho semanas antes del choque con a la RDA, clasificatorio para el mundial. Dos de los mejores jugadores polacos Mlynarczyk y Boniek, estaban sancionados por encabezar un movimiento de protesta hacia el anterior seleccionador.

El seleccionador está a favor de las primas, de motivar a los jugadores. Para él, "'los jugadores no deben ganar el mismo dinero, sean buenos o malos. Este sistema ha creado jugadores perezosos, con poco interés por el juego, y con el deseo de llegar a los treinta años con las menores lesiones posibles a cuestas, para así poder emigrar al fútbol extranjero". Su teoría se basa en la "resistencia, concentración y capacidad de lucha durante noventa minutos".

Boniek juega con el 9, a pesar de no ser el delantero centro. Es su número favorito. Zbigniew Boniek es una de las estrellas de la selección polaca. A sus 26 años es, aparte de figura indiscutible, el jugador más polémico de la selección polaca, puesto que fomentó constantes declaraciones contra los técnicos que no eran de su agrado. Además de contestatario, Boniek es sincero y no se ha reprimido al declarar que le encantaría jugar en el fútbol extranjero, y más concretamente en Alemania Occidental A pesar de no contar con los preceptivos 30 años de edad, Boniek espera que, si actúa de forma sobresaliente en el Mundial se le permita fichar por un equipo extranjero.

Boniek comenzó su carrera en el Widzew Lodz, equipo modesto de la Segunda División, a los 19 años. Cooperó en el ascenso de este equipo a la categoría superior y se, convirtió en uno de los gallitos del torneo liguero polaco. La nueva estrella, polaca destacó pronto por sus grandes cualidades futbolísticas. Ha sido, a pesar de las sanciones, cincuenta veces internacional, tiene gran técnica y un buen disparo a puerta, factor que le ha permitido marcar con la selección 16 goles.

Falta un guardameta

El resto de la selección se ha rejuvenecido con respecto a campeonatos anteriores, donde llegó a pecar de veteranía. Excepto el defensa Zmuda, el centrocampista Lato y el delantero centro Szarmach, todos los demás internacionales están entre los 20 y 25 años. Ejemplos de la nueva ola polaca son Dziekanowski y Matysik. El primero es delantero, tiene 19 años, y Matysik, 20. Ambos son las últimas incorporaciones polacas. Sin embargo, el técnico no ha resuelto un grave problema: la ausencia de un guardameta de garantía como Tomaszewski.

Para ello el candidato es Mowlik, también veterano, con 31 años y 28 veces internacional. Pero no es un gran guardameta. Luego, tanto Mlynarcyk como Kazimierski tienen escasa experiencia internacional.

Todo lo contrario sucede en la línea defensiva, compuesta por jugadores expertos: Djuba (26 años) ha sido internacional en 55 ocasiones; Janas (28 años), 38 veces internacional; Zmuda (27), 73 actuaciones internacionales, y Jalocha (24), 74. Es la línea que conserva mayor experiencia, pero no la más significativa, honor que está reservada a la delantera, donde Lato (31 años y 95 veces internacional) y Szarmach (31 años, 59 veces internacional) no han perdido su renombre.

Por último, la línea de centrocampistas, capitaneada por el cerebro Bonick, está muy reformada, con jugadores jóvenes y de poca experiencia internacional. Es un bloque nuevo, cuya prueba de fuego. será el Mundial-82, línea, además, que pondrá a prueba la labor técnica de Piechniczek. Matysik (20 años), Majewski (25), Kupcewick (26) y Buncol (22) son sus integrantes.