La resistencia activa al régimen polaco, limitada a zonas mineras
La resistencia activa al régimen militar polaco se reduce cada día más a la región minera de Silesia, donde 1.121 obreros permanecen aún encerrados en la mina Piast. Entre tanto, el sindicato Solidaridad hizo su cuarto llamamiento clandestino a la población, conocido ayer en Occidente, en el que solicitó apoyo a los negociadores católicos y exhortaba a la población a mantener la resistencia pasiva.Moscú y Varsovia reiteraron ayer sus críticas contra la Administración norteamericana del presidente Ronald Reagan, quien ha decidido algunas medidas de represalia contra Polonia y la URSS.
A última hora de ayer era esperado en Roma el enviado del Papa a Varsovia, cardenal Lulgi Poggi, quien entregó al general Wojclech JaruzeIski un mensaje de Juan Pablo II y trató con el primado polaco, cardenal Jozef Glemp, sobre la actuación de la Ilesia. que, a través de un grupo de consejeros, tratará con las autoridades la eventual reanudación del diálogo.
Mientras Solidaridad insistía en las malas condiciones de los miles de prisioneros, dos intelectuales polacos exiliados en Estados Unidos informaban que los líderes del autodisuelto Comité de Autodefensa Social (KOR), Jacek Kuron y Adam Michnik, han sido duramente torturados. Valentín Falin, alto funcionario político de la URSS, dijo ayer en Moscú que diez personas han muerto en Polonia desde la instauración del régimen militar, frente a las siete reconocidas oficialmente.
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