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La OPEP reduce mínimamente el precio de ciertos crudos

La OPEP decidió ayer rebajar entre 20 y 70 centavos de dólar el precio de determinados crudos que no pueden competir con el tipo árabigo ligero, producido básicamente por Arabia Saudí, cuyo precio de 34 dólares está congelado desde el pasado octubre hasta el final del próximo año.La mínima reducción del precio, que viene por la disminución de alguno de los diferenciales que se cargan sobre el precio básico, apenas representará una baja real de incrios de medio dólar en el coste medio del barril importado por Occidente. Básicamente sólo afectará a los crudos de Irán, Kuwait, Argelia, Libia, Abu Dabi y Qatar, entre los trece miembros del consorcio.

Para España, sin embargo, la rebaja representa un ahorro limitado, no superior al 2% de su factura petrolera, que en 1982 rondará los 11.000 millones de dólares (un billón de pesetas). En cifras totales, la baja supondrá un menor gasto de unos 180 millones de dólares, es decir, unos 1.800 millones de pesetas.

El ministro de Petróleo de los Emiratos Arabes Unidos, Manaa Saed Al Oteiba, en su calidad de presidente de turno de la OPEP, confirmó la noticia al término de la 62ª conferencia ordinaria de la OPEP, que se ha celebrado durante los últimos tres días en un hotel de Abu Dabi.

La fórmula elegida por los trece ministros para acordar esta ligera rebaja es la disminución de ciertos diferenciales. Los diferenciales son las primas, positivas o negativas, que se cargan sobre los distintos crudos en función de su calidad, grado API o cercanía a los mercados.

La baja de algunos diferenciales, especialmente en los crudos de densidad extrema (casos de los norteafricanos o los pesados del Oriente Próximo), permitirá que el precio de un barril oscile entre los 32,30 dólares del crudo kuwaltí hasta los 37 dólares que pasará a costar el crudo argelino y libio.

Exceso de oferta

La reducción de estos precios no es más que una respuesta de la OPEP a la situación particular que vive el mercado mundial de petróleo. La Agencia Internacional de la Energia (AIE) ha estimado que en 1982 la oferta de petróleo volverá a superar a la demanda, con lo que previsiblemente se agravarán los problemas de los países productores para colocar sus crudos.

Este problema ha sido especialmente grave para algunos países, como Nigeria, Libla o Argelia, cuyos precios, máximos en el contexto de la OPEP, han experimentado una disminución de más del 10% en los últimos doce meses. El caso de Nigeria es particularmente interesante, pues ha llegado a ofrecer descuentos de dos y tres dólares en su precio para poder vender más petróleo.

Otro caso sintomático es el de Irán, país que ayer abogó en Abu Dabi por mayores rebajas que las aceptadas. Irán, muy radical en sus planteamiento de precios hace un año, desea recuperar sus clientes habituales, que le han abandonado por ofrecer crudos de baja calidad a precios superiores a los máximos.

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