Un recluso se corta los testículos en la cárcel de Tarragona
Pedro Pulido Magaña, de veintiséis años, prisionero en la cárcel de Tarragona, se cortó ayer los testículos con un cristal procedente de un tubo de luz fluorescente y los arrojó por la ventana al patio de la prisión. Uno de los funcionarios vio como caía un extraño bulto al patio y avisó a sus compañeros por si pudiera tratarse de un intento de introducir droga en la cárcel.El preso herido fue trasladado urgentemente a la clínica de Santa Tecla, donde se le practicó una operación quirúrgica. El parte posoperatorio indica que se encuentra fuera de peligro. Hacía poco tiempo que Pedro Pulido había terminado de cumplir condena de tres años, y el pasado sábado reingresó en la prisión acusado de diferentes delitos, entre ellos el de haber lesionado gravemente a un hombre durante una riña. Anteanoche había tenido una disputa con otro recluso, al que lesionó levemente con una navaja.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.