Fuerte aumento de los incentivos fiscales , las empresas para el año 1982

Los beneficios fiscales o ingresos que el Estado dejará de percibir en 1982 para fomentar actividades económicas y sociales tendrán uno de los mayores aumentos de los últimos años, el 19,6%, hasta situarse en 555.800 millones de pesetas, según estimaciones de Hacienda. Este presupuesto de gastos fiscales, que se configura como medio alternativo a las subvenciones o gastos del Estado, aligerará notoriamente la presión impositiva de las empresas.

El presupuesto de gastos fiscales, cuyo desglose por impuestos en 1981 y 1982 aparece en el cuadro adjunto, incluye las exenciones, bonificaciones, reducciones y desgravaciones que suponen desviación de la estructura de cada tributo. Su realización, por ello, resulta difícil, y, de hecho son pocos los países -afirman fuentes de Hacienda- que lo hacen puntualmente.Al comparar las estimaciones de los beneficios fiscales españoles añadidas a los tres últimos Presupuestos del Estado, se observa una paulatina inclinación hacia las actividades económicas, más fuerte en 1982. Concretamente, los gastos fiscales de los impuestos sobre sociedades, tráfi¿o de empresas y tráfico exterior (derechos aduaneros y compensación de gravámenes interiores) suman, para 1982, unos 418.000 millones de pesetas, algo más del doble que sus equivalentes de 1980 y casi 130.000 milones más que en 1981.

A ello podría añadirse que la desgravación fiscal a la exportación, no incluida entre los gastos fiscales, pasará de los 169.659 millones de 1980 a 210.000 millones en el presente año (inicialmente se estimaron 195.000) y a 250.000 millones en el próximo.

En el impuesto sobre socieda des, los beneficios o gastos fiscales representarán el próximo año un 70,5% de los ingresos previstos frente al 60% de 1981 y al 59,6% del ejercicio anterior. Igualmente, en tráfico de empresas se pasa del 29,2% de 1980 al 38,6%, y luego al 71,9%. Y en tráfico exterior, des pués de bajar del 55,9% al 39,7% en los dos últimos años, se recuperará hasta el 47,9% el próximo año.

Trabajo y consumo pierden

Por el contrario, los beneficio de otros impuestos ligados principalmente al trabajo y al consumo muestran una tendencia a la reducción en términos de porcentaje sobre ingresos inicialmente presupuestados. El caso más claro es el de los impuestos sobre consumos que pasan del 42% en 1980 al 13% en los dos presupuestos siguientes. Igualmente, en el impuesto sobre la renta de las personas fisicas, cuyos gastos fiscales estimados par 1980 representaban el 12,4%, se ha registrado una reducción, primero hasta el 7,9% y luego al 7,2%.Los desgloses efectuados por Hacienda sobre clasificación funcional de los gastos no ofrecen mucha precisión a la hora de determinar su destino. Las clasificaciones manejadas para 1982 indican que el 1,7% de los beneficios serán disfrutados por actividades de carácter general (4.233 millones de pesetas, defensa; 2.774, servicios generales, y el resto, el capítulo "varios"), el 42,1%, por actividades sociales (destacan 68.442 millones para vivienda, 73.630 para sanidad, pensiones, Seguridad Social y beneficencia, 6.977 para educación, y el resto para "varios"), y el 56,2%, por actividades económicas.

Dentro de estas últimas, no obstante, el citado capítulo "varios" llega a englobar 205.925 millones de pesetas. El resto se reparte así: 36.617 millones, transportes y comunicaciones; 36.537, comercio; 20.680, minería, construcción e industrias varias; 11.232, agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca, y 1.479, energía. La clasificación, pues, resulta poco significativa, como prueba que dentro de "varios" se incluyan los beneficios a empresas eléctricas, cifrados confidencialmente por algunos medios de Hacienda en más de 60.000 millones de pesetas.

Ha trascendido que, dentro de los beneficios estimados para el impuesto sobre la renta de las personas físicas (el 7,2% sobre los ingresos previstos), el mayor peso corresponderá en 1982 a la desgravación por inversiones en vivienda propia, que representará el 67% del total.

También se sabe que el 23,2% de los gastos por sociedades se destinará a incentivar la inversión empresarial, y el 61,8%, a actividades de financiación. En el impuesto sobre el tráfico de empresas destacarán las exenciones a favor de los seguros obligatorios, actividades de exportación y productos de primera necesidad. Asimismo, el 90% de los beneficios en consumos corresponderán a exenciones para automóviles.

De cara a los próximos años es previsible que se recorten algunos beneficios para actividades económicas. El proyecto de ley de Presupuestos para 1982 contiene varias medidas que tienden a disminuir los del impuesto de sociedades.