Depurados 152 militares "extremistas" egipcios

La caza a los elementos islámicos integristas adquirió amplias proporciones durante el pasado fin de semana en todo el valle del Nilo y abarcó incluso al Ejército egipcio.Cuarenta y ocho oficiales y 104 suboficiales y soldados han sido expulsados definitivamente de las fuerzas armadas a causa de sus "tendencias religiosas extremistas".

Estas medidas contra militares en activo han sido decididas, según el general Abu Ghazala, ministro de Defensa, en el marco de la investigación iniciada por los servicios secretos sobre actividades subversivas. Las expulsiones no han suscitado ningún malestar en las filas del Ejército, según Ghazala.

Aparentemente, los 152 militares expulsados y destinados a cargos civiles no están implicados en el asesinato del presidente Sadat, perpetrado por un comando encabezado por un oficial integrista, teniente Jaled el Islambuli.

La investigación llevada a cabo por los servicios secretos intenta determinar exactamente de que complicidades dispuso el comando, integrado por tres civiles, para poder infiltrarse con armas cargadas en el desfile militar que presidía Sadat.

Paralelamente a esta purga en las filas del Ejercito, los mojabarat (servicios secretos) persiguen a las organizaciones integristas, que, según los comunicados oficiales, resultan ser poderosas, disponen de grandes cantidades de armas y estan bien estructuradas.

Las operaciones de rastreo abarcan desde Alejandría hasta Asuán, pasando por numerosas ciudades y pueblos del valle del Nilo y las áridas montañas del alto Egipto. Numerosos controles han sido instalados en las principales carreteras y los motoristas de la policía persiguen y paran a cualquier vehículo sospechoso.

"Terroristas religiosos"

Hasta el momento han sido detenidos 230 "terroristas religiosos". En su mayoría están afiliados a la Confraternidad Islámica, integrada principalmente por estudiantes militantes del grupo de los Hermanos Musulmanes, y a la organización paramilitar Takfir wa Hiyra (Arrepentimiento y lucha sagrada). Cuatrocientos miembros de esta organización fueron detenidos por orden del presidente Sadat cuatro semanas antes de su asesinato.Según los servicios secretos, las dimensiones de la "conspiración" preparada por los integristas son "tremendas", y los jóvenes fundamentalistas encabezados por un ex oficial de los servicios de seguridad, Abud el Zommor, tenian la intención de desencadenar una "revolución jomeinista" en Egipto.

Mientras tanto, la agencia egipcia Mena informaba ayer que la aviación libia ha bombardeado en los últimos tres días cuatro localidades sudanesas, lo que ha obligado a sus habitantes a abandonarlas en parte.