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El Gobierno Civil sale al paso de las acusaciones de la Unión Sindical de Policías sobre grupos especiales

El Gobierno Civil de Madrid ha negado en una nota oficial que en la manifestación anti-OTAN del pasado jueves hubiesen participado policías nacionales de paisano con instrucciones para intervenir en el desarrollo de los actos convocados por el PCE. Por su parte, la Unión Sindical de Policías (USP) afirmaba el viernes en un comunicado que se había detectado una gran indignación entre comisarios jefes de distrito "por la actuación de un grupo de información de la Policía Nacional, vestidos de paisano, que, al mando de un comandante y un capitán, se personaron ayer (por el jueves) en la comisaría de Retiro con unos fines nada claros de intervenir en la manifestación legal".

El Gobierno Civil ha salido al paso del desconcierto existente en medios policiales como consecuencia de los hechos del pasado jueves, en los que un policía nacional de paisano, en evidente estado de embriaguez, provocó diversos incidentes. La nota oficial indica, al mismo tiempo, que los responsables de los hechos, que aún no han sido aclarados, pasarán a disposición judicial y tendrán que responder de sus actos. Además, queda una de las acusaciones que realizaba la Unión Sindical de Policías sin aclarar debidamente. En principio, la USP atacaba el hecho de que mandos militares estuviesen encargados de diversas funciones policiales.Por otra parte, en relación con las acusaciones de la USP sobre la existencia de grupos de información de la policía que se presentaron en la comisaría de Retiro antes de iniciarse la manifestación anti-OTAN, el Gobierno Civil entiende que Ias salidas y entradas de Policía Nacional vestido de paisano en la comisaría, en la calle Huertas, es un hecho que ocurre a diario, consecuencia de existir allí acuartelamiento de estas fuerzas con comedor y clínica donde se producen las tomas de servicio, relevos, etcétera".

En la mencionada nota de la USP se hacía referencia a que un grupo de veinte policías nacionales vestidos de paisanos se habían presentado en la comisaría de Retiro. Esto, que se desconoce oficialmente, es el que hizo pensar a la organización policial en la posible existencia de grupos especiales antimanifestaciones, cuya vinculación con la extrema derecha parece evidente.

En todo caso, a título particular

Un nuevo dato que ha podido conocer este periódico hace referencia a que el policía nacional apodado El Moro, que efectuara los disparos tras la manifestación comunista, se encontraba en la comisaría de Retiro poco después de tener lugar los hechos, aunque en esta comisaría se negara en todo momento a EL PAIS que nadie hubiera sido detenido. Por lo demás, el pasado viernes dicho policía pasó a disposición judicial.El Gobierno Civil deja abierta la posibilidad de que algún policía de paisano circulase por los alrededores de la manifestación, aunque a título particular. Además asegura que los servicios de seguridad de la manifestación estuvieron en todo momento en contacto con los funcionarios del Cuerpo Superior de Policía destinados para estos fines, y dice no tener noticia de la existencia de otros agentes participantes en la manifestación distintos a los que cumplían su servicio reglamentario.

En cuanto al incidente protagonizado por el policía nacional Al-lal Haddi-al Lal, oriundo de Ceuta, que después de la manifestación efectuó dos disparos al aire y agredió a varios transeúntes, el Gobierno Civil lo considera "suficientemente aclarado", y señala que Ios responsables han sido puestos a disposición de la autoridad judicial correspondiente. El Gobierno Civil considera que "no existe nexo alguno" entre la virulenta actuación del policía y la de los demás miembros las fuerzas del orden y la manifestación citada.

Tampoco coinciden con el contenido de la nota del Gobierno Civil declaraciones presenciales de participantes en la manifestación y de informadores que acudieron a la misma para realizar su trabajo. Un policía nacional de paisano, de espaldas en la fotografía, destrozó el flash de un fotógrafo de Prensa, entre otros resultados de la intervención de las fuerzas de seguridad. Según informaciones recogidas por los informadores, el citado policía nacional ceutí formaba parte de un supuesto grupo especial represivo cuyo objetivo era, desde su creación en 1973, la de contrarrestar desde dentro las manifestaciones que se llevaban a cabo bajo el régimen político anterior.

El Moro, según se conoce a Allal Haddi-al Lal, fue reconocido el jueves poco después de la manifestación anti-OTAN y detenido por efectivos de la Policía Nacional tras su intervención violenta contra pacíficos transeúntes. A pesar de que hasta ahora el supuesto grupo policial encargado de abortar manifestaciones desde dentro no portaba armas, en esta ocasión, para extrañeza de la propia policía, al menos el guardia detenido iba armado.

Fuentes próximas al Gobierno Civil de Madrid indicaron a EL PAlS que en ningún momento de la manifestación se encontraba, en misión oficial, policía de paisano alguno, por lo que los miembros del Cuerpo que estuvieran en la zona lo estarían "como simples ciudadanos". Sin embargo, testigos presenciales de los hechos y los documentos fotográficos publicados por este periódico muestran claramente cómo en el lugar de los hechos aparecen varias personas sin uniforme oficial alguno, que portan armas e incluso esposas.

Por último, cabe destacar que la nota del Gobierno Civil no reconoce ni niega la existencia de un grupo especial, creado en 1973 según la USP, para reventar las manifestaciones que se pudieran convocar durante el anterior régimen. La USP desconocía su existencia actualmente.

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