UGT propone el abandono definitivo de la energía nuclear de fisión y la potenciación de otras fuentes alternativas

Unión General de Trabajadores (UGT) propone el abandono "ordenado y definitivo" de la energía nuclear de fisión, sacando el mayor aprovechamiento posible de las inversiones ya realizadas, según se desprende de un trabajo realizado por las federaciones de Minería, Energía y Química de UGT, y cuyas conclusiones más destacadas serán presentadas en forma de ponencias al 29 Congreso del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). El abandono de la energía nuclear de fisión, junto con la potenciación de otros medios energéticos es lo que forma la alternativa energética de UGT, que ha sido elaborada por las citadas federaciones con la colaboración de técnicos socialistas. El conjunto de todos los trabajos será posteriormente publicado en forma de libro (con prologo de Enrique Barón) y presentado a la Prensa el próximo lunes.

Las razones en las que se basa el equipo de técnicos que han elaborado el citado trabajo son fundamentalmente "el carácter ruinoso de la producción electronuclear, el callejón sin salida que, representa la fisión nuclear para los países dependientes y la rigidez de la crisis nuclear para España, que se desarrollará en unas condiciones inapelables, sin las posibilidades de defensa con que se puede hacer frente a la crisis del carbón o a la del gas natural".Para UGT, la nuclearización de España es una realidad precaria "que nos condena a una próxima crisis abrupta" si antes no se abandona. En este sentido, el informe afirma que desde un punto de vista económico la energía nuclear puede resultar conveniente en países como Estados Unidos o la Unión Soviética, que disponen de recursos y tecnología suficiente. España, dice UGT, sufrirá escasez de uranio antes que estos países, que tienen calculadas existencias hasta finales de siglo.

Los pasos para abandonar la energía nuclear comienzan con la cancelación de todos los compromisos de compra de instalaciones nucleares no consolidados y renegociación de los contratos ya firmes, revendiendo los equipos no estrenados ni contaminados, para pasar la desmontar y trasladar los equipos no específicamente nucleares para su aprovechamiento en las grandes centrales de carbón a construir. Al mismo tiempo, se procedería a la transformación de las centrales nucleares, sustituyendo sus reactores por calderas de gas natural o carbón.

En cualquier caso, el informe se muestra partidario de realizar una consulta popular sobre la conveniencia del abandono de la energía nuclear, advirtiendo que en caso de que la citada consulta resultara contraria "hay que mantener la expectativa de un plan de abandono actualizado, porque este plan", asegura el estudio, "tendrá que ser finalmente acometido a causa de la crisis nuclear que se avecina".

De cara a los interés particulares comprometidos en la producción electronuclear, y con el fin de hacer evidente la conveniencia de este abandono, UGT propone la supresión inmediata de las "cuantiosas subvenciones encubiertas".

Potenciar el carbón

Especial importancia da el informe al tema del carbón, proponiendo como objetivo alcanzar una producción nacional de carbón de cincuenta millones de toneladas para el año 2000, extendiendo las explotaciones a cielo abierto. A partir de ese año se estiman unas importaciones de veinte millones de toneladas de carbón, que se realizarían a través de tres grandes puertos (Gijón, Algeciras y Carboneras) a partes iguales.En cuanto a las inversiones necesarias para alcanzar los objetivos citados, UGT propone un incremento de un 250% en los fondos destinados por el Plan Energético Nacional (PEN) a investigación interior y tecnología, aumento de un 63% de la inversión para minería interior y del 43% en las inversiones previstas en el extranjero para potenciar las importaciones a largo plazo.

Junto a estas medidas se citan las de crear una empresa nacional para la producción del carbón, que uniría los actuales intereses del INI y la concentración de empresas privadas. La reforma de Hunosa y la constitución de una empresa nacional dedicada a la comercialización del carbón, tanto nacional como extranjero, completan las propuestas planteadas en este sentido por la central socialista.

Explotación y consumo

También para los temas de transporte y comercialización de la energía, UGT, en el citado trabajo, se muestra partidaria de crear una empresa nacional que asuma estas funciones y que sería la única que explotaría la red principal de transporte, "adquiriendo en exclusiva las producciones de las centrales y asignando las entregas a las empresas distribuidoras o a los consumidores directos. La creación de esta empresa", continúa el informe, "implicaría la nacionalización de la propiedad de la red primaria de transporte hasta por lo menos el 51% de la misma, a partir de un 25% actual que ya pertenece a las empresas del INI. Este sistema, según los técnicos que han elaborado el plan, sería la única forma de conocer los costes reales de producción eléctrica.Este conocimiento de costes es lo que, a juicio de los autores del documento, impedirá que continúe el procedimiento seguido hasta ahora por el sector energético privado de financiar en parte sus nuevas inversiones a través de un aumento de tarifas.

En la alternativa de UGT se propone una política de precios articulada en dos etapas sucesivas: conocimiento de los costes y aplicación inmediata de una política fiscal que tienda a reducir las distorsiones del consumo. Respecto a las subvenciones, se indica que se deben revisar, "en general con intención de suprimirlas".

Enrique Barón, habitual portavoz del PSOE en temas económicos, señala en el prólogo que la crisis energética y sus respuestas no son un problema meramente técnico. "Se trata, por su dimensión su alcance y su complejidad, de opciones que requieren e implican un auténtico desafío político". Para los expertos que han intervenido en las ponencias, la reflexión energética es importante para el sindicato como organización de los trabajadores, fundamentalmente en un momento de grave crisis económica.