Sempere: "Cada ciudad necesita un museo de arte contemporáneo"
Exposición de esculturas, pinturas, "gouaches" y obra gráfica
El pintor alicantino Eusebio Sempere (1924), presidente del Patronato del Museo Madrileño de Arte Contemporáneo, inauguró anteayer, en la galería vallisoletana Carmen Durango, una amplia muestra de sus creaciones más recientes. Al filo de esa exposición, el artista reflexiona sobre temas varios: su propio quehacer, el hecho de exponer en provincias -y los proyectos oficiales en favor de las artes plásticas.
No es Sempere un pintor que se prodigue mucho en muestras individuales de su obra: «Necesito dos o tres años para preparar una exposición medianamente seria. A mí siempre me pillan con no más de diez cuadros disponibles». Ahora mismo se halla obsesionado con la tarea de reunir el material necesario destinado a importantes exposiciones personales que le han solicitado desde el extranjero: una, en la galería Denise René, en París; otra, en la Universidad norteamencana de Pasadena.Pese a ello, nunca suele desatender las peticiones, que le llegan desde ciudades pequeñas. Creador de un hermoso museo en Alicante, opina que cada ciudad necesitaría uno para atender a la demanda latente: «Es aberrante que haya que desplazarse a Madrid o Barcelona para contemplar el arte de vanguardia. Como se sabe, yo soy bastante escéptico a la hora de valorar positivamente la pintura de nuestro siglo, que no resiste la comparación con las obras clásicas. Así y todo, es preciso conocer cuanto se ha hecho y se sigue haciendo. La gente joven tiene avidez por estar al corriente de las nuevas tendencias. De ahí que en la última reunión del Patronato del Museo de Arte Contemporáneo acordásemos enviar exposiciones itinerantes por provincias».
Mientras tanto, a menudo heroicamente, las galerías particulares luchan por cubrir tal laguna: «Realizan un esfuerzo enorme. Ese es el caso del director de la galería donde ahora expongo, Antonio Manchón, quien, contra viento y marea, va presentando en Valladolid muestras de calidad, frecuentemente acompañadas de preciosas ediciones de bibliofilia. Pero el Ministerio de Cultura tiene que contribuir con iniciativas propias para reforzar esa aventura privada. Es consolador en tal sentido que el actual director general de Bellas Artes, Javier Tusell, piense abordar esa empresa».
De cara a la presencia de obras plásticas en lugares públicos, Sempere, junto a Aiirelio Biosca, ha sido el asesor designado por el ministro de Transportes, José Luis Alvarez, para cuidar el aspecto estético del aeropuerto de Barajas: «En medio de una larga lista de artistas participantes, creo que vale la pena destacár la adquisición de un gran tapiz de Picasso, un mural de Tàpies, una escultura de Joan Miró y otra de Pablo Palazuelo».
Todas esas actividades no le impiden a Eusebio Sempere seguir creando una de las obras más sigilosas y atractivas del presente.
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