Rumania, incapaz de pagar sus deudas con Occidente
Después de Polonia, Rumanía se ha convertido en un problema para círculos financieros occidentales, después de que este último país declarase la pasada semana su "incapacidad temporal para pagar la deuda" contraída con los países capitalistas, que, según su ministro de Finanzas, Stelan Marin, es de 6.000 millones de dólares, y 10.000 según fuentes del Oeste.En la misma declaración gubernamental rumana se solicita un escalonamiento del pago de la deuda a corto plazo, comenzando por el 25% de los 10.000 millones de dólares (más de 900.000 millones de pesetas).
En opinión de expertos, esta última cifra debe ser incluso superior, debido a otros créditos obtenidos por Rumanía en el mercado de los eurodólares, donde en principio no puede negociar el Gobierno de Bucarest. Sin embargo, tres bancos norteamericanos y otro japonés, que trabajan con eurodólares, aprobaron en mayo pasado un crédito a Rumania de ochenta millones de dólares.
Asimismo, el Banco Mundial otorgó el pasado mes de julio al Gobierno rumano un crédito de 125 millones de dólares.
El anuncio en Rumania de estos problemas financieros coincide con la destitución del ministro de Agricultura, Angelo Miculescu. Por su parte, el presidente, Nicolae Ceaucescu, repite desde hace semanas llamamientos a la disciplina laboral y ha anunciado mejores perspectivas para la actividad privada a fin de mejorar el abastecimiento de la población.
Bucarest, que hace poco tiempo estaba diametralmente opuesta a un plan de integración económica bajo tutela de la URSS, insiste ahora en ese proceso integrador que debería comenzar con una conferencia económica de los países del Comecon (mercado común del Este europeo).
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