_
_
_
_

Difícil camino para sustituir en Europa la sanidad asistencial por la medicina preventiva

La Conferencia de Ministros Europeos de Salud Pública, celebrada en Madrid, terminó ayer con el acuerdo general sobre la necesidad de promover estructuras que potencien la salud, mediante acciones de prevención y de educación, pero sin haber ahondado en el estudio de los mecanismos que hagan realmente posible la reconversión hacia una nueva alternativa del actual sistema sanitario, basado en la medicina curativa del medicamento y de las redes macrohospitalarias.

Gaetano Adinolfi, secretario general adjunto del Consejo de Europa, explicó que el trabajo de esta primera conferencia había hecho un esbozo de la situación sanitaria europea, «pero que no se podía ser demasiado ambicioso y pretender zanjar todas las cuestiones en dos días».El documento final de la conferencia incluye varias recomendaciones, que serán remitidas al Consejo de Europa, a modo de puntos normativos que permitan iniciar una «estrategia europea para la salud».

Los intereses económicos y políticos que inciden en los planteamientos sanitarios de cada país, y en la interrelación de Estados, han quedado patentes en esta conferencia, cuyo documento final se centra casi exclusivamente en un apunte de desarrollo de las citadas intenciones de prevención y educación para la salud, y se diluye finalmente en una llamada de atención sobre los manidos temas del tabaco, el alcohol y las drogas, dejando para más adelante temas como los de la relación del trabajo y del medio ambiente en la salud, que posiblemente se tratarán en la segunda conferencia, a celebrar, en Suecia, dentro de tres años, o «en una reunión informal de los ministros europeos de Salud, que trataría sobre los problemas de la salud en el ámbito del trabajo », y que se celebraría en Francia, sin que se haya fijado fecha, ni se recoja con exactitud la propuesta del ministro francés, más concreta e incisiva sobre la influencia que la industria, la agricultura y la penetración de las multinacionales ejercen en la salud europea.

El ministro español, Jesús Sancho Rof, que ha presidido la conferencia de Madrid, manifestó a EL PAIS que la delegación española «ha jugado un papel de aproximador de los diferentes y, a veces, contrapuestos criterios políticos, para llegar a acuerdos, así como lograr la fijación de unos puntos normativos como resultado de esta reunión».

Sancho Rof aseguró que España «asumirá la totalidad de las recomendaciones, que serán consideradas dentro de la legislación». En el conjunto de dichas recomendaciones, la delegación española aportó varias; entre ellas, «que la educación para la sanidad se contemple en el seno de la familia, además de la escuela, y que se considere el paro como un factor importante de la salud». Sancho Rof precisó, en este sentido, que esta consideración «encontró algunas resistencias, en principio, por parte de algunos ministros, que no querían expresar este compromiso».

La potenciación de la investigación científica, y el intercambio de la misma, es el punto de recomendación en el que la conferencia se ha manifestado más acorde, y que estima más viable inmediatamente, así como en la idea de que dicha investigación ha de ser la base de la prevención. Sin embargo, este último criterio, expresado en los debates, no se incluye en la normativa final.

El cambio de mentalidad operado en Europa a partir de la crisis energética sobre el concepto de sanidad, para orientarlo hacia una idea de salud, es consecuencia de las dificultades de los Gobiemos para sufragar el gran coste de una política sanitaria fundada en lo asistencial y gestada en un anterior desarrollismo.

Al mismo tiempo, se descubre que esa estructura asistencial es perniciosa para la salud y se inicia la búsqueda de un nuevo modelo. En este sentido, la conferencia de Madrid aboga por "la responsabilización del individuo sobre su propia salud» y por «una nueva mentalización social o educación colectivizada e individualizada sobre la salud».

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_