Boicoteo de los prosoviéticos a Carrillo en la fiesta de "Treball"

Unos quinientos militantes del PSUC, pertenecientes a agrupaciones del partido en donde la tendencia prosoviética es mayoritaria, intentaron boicotear la intervención del secretario general del PCE, Santiago Carrillo, en el mitin de clausura de la fiesta de Treball, celebrada en Barcelona el pasado fin de semana. Esta es la segunda ocasión en que Carrillo es fuertemente abucheado en Barcelona por miembros del PSUC. La primera vez fue el pasado mes de marzo, con motivo de un mitin organizado tras el frustrado golpe de Estado del 23 de febrero. Asistían al mitin más de 30.000 personas.El grupo de militantes que contestó el discurso y la presencia de Carrillo se situó a una treintena de metros frente al escenario del mitin. La mayoría de ellos llevaban pegatinas con la leyenda Soc comunista. Visca el 5º Congrés. PSUC (Soy comunista. Viva el 5º Congreso. PSUC), aludiendo al congreso en el que no se admitió el término eurocomunismo de las tesis del PSUC, más tarde impuesto por decisión del Comité Central.

Los prosoviéticos hicieron sonar insistentemente carracas, con lo cual el discurso de Carrillo llegó con dificultad a parte del público. Los proso0éticos portaban un enorme retrato de Lenin y coreaban gritos de traidor, fascista y fuera, fuera, referidos a Carrillo. Miembros del servicio de orden establecieron un cordón de seguridad frente a los boicoteadores. Hubo intercambio de insultos y golpes entre ambas partes.

Al margen de los incidentes -hubo más enfrentamientos físicos entre los miembros de las dos tendencias de las Juventudes Comunistas de Cataluña (JCC)-, la dirección del PSUC consideraba anoche que el resultado global de la fiesta de Treball era positivo. Se calcula que entre 200.000 y 250.000 personas pasaron por el recinto de la fiesta.